EE.UU. aumenta su involucramiento militar en Siria

Un convoy de fuerzas estadounidenses se desplaza cerca de la población de Yalanli, en los suburbios occidentales de la norteña ciudad siria de Manbij, el 5 de marzo, de 2017.

Estados Unidos aumentó su involucramiento en la guerra contra el grupo Estado Islámico al organizar un traslado aéreo sin precedentes de combatientes árabes y kurdos en aeronaves estadounidenses hasta el frente en el norte de Siria.

La maniobra contó con apoyo de artillería y helicópteros de ataque de Estados Unidos, utilizados por primera vez en el país.

Las fuerzas estadounidenses no participaron en el combate en tierra, pero la operación apunta a que el gobierno de Trump ha adoptado una estrategia más agresiva mientras prepara el ataque a Raqqa, la ciudad que los extremistas consideran su capital. Además de utilizar helicópteros para llevar a los rebeldes hasta el combate cerca de la represa de Taqba, en el río Éufrates, Estados Unidos llevó dos helicópteros Apache y empleó artillería de 155 mm de los marines.

"Esto es bastante importante", comentó el miércoles a periodistas en el Pentágono el coronel Joseph Scrocca, portavoz de la coalición militar que lidera Estados Unidos contra el grupo extremista Estado Islámico en Siria e Irak.

Es la primera vez que las tropas estadounidenses trasladan por aire a combatientes locales hasta el combate en Siria, señaló. Entre los rebeldes había un número no especificado de asesores militares estadounidenses.

Se espera que la ofensiva en Siria dure varias semanas, indicó Scrocca. El grupo EI ha empleado la represa como base, prisión para rehenes de alto nivel, campo de entrenamiento y lugar para planificar ataques en el extranjero desde 2013.

Se temía que la milicia pudiera destruir la estructura, inundando la región y creando nuevos desafíos humanitarios.

Mientras tanto, Estados Unidos recibió en Washington a altos funcionarios de 68 países para una reunión sobre cómo acelerar la lucha contra el grupo extremista a todos los niveles.

En la primera reunión de ministros en territorio estadounidense desde que Donald Trump asumió el gobierno, el secretario de Estado, Rex Tillerson, dijo que Washington aún está definiendo su estrategia, aunque fue claro en cuanto a las prioridades.

"Reconozco que hay muchos desafíos urgentes en Oriente Medio, pero derrotar a ISIS es el objetivo número uno de Estados Unidos en la región", dijo Tillerson empleando un acrónimo para el grupo EI.

Aunque esa declaración parecía compartida, algunos asistentes confiaban en conocer más sobre los cambios de estrategia.