Un hombre de 58 años del este de Texas que se declaró culpable de un tiroteo en 2003 que causó la muerte de dos de sus vecinos, será ejecutado.
Está previsto que Barney Fuller Jr. sea ejecutado el miércoles. Será la séptima ejecución de este año en Texas y la primera en seis meses en el estado donde se realizan más ejecuciones en Estados Unidos.
La ejecución será la décimo sexta este año en todo el país, reflejando una disminución en la aplicación de la pena capital, dado que cada caso es sometido a mayor escrutinio y la dificultad que enfrentan los estados en obtener las drogas para la inyección letal.
Fuller ha pedido que no se realicen apelaciones para salvar su vida.
Él ha sido declarado culpable de asesinar a Nathan Copeland, de 43 años, y a su esposa, Annette, de 39, tras una larga disputa por una llamada telefónica amenazante que él le hizo a la pareja.