La Corte Suprema de EE.UU. rehusó conceder una prórroga a la ejecución que había sido solicitada por el abogado del condenado a muerte.
Un reo de la raza negra condenado a muerte fue ejecutado la madrugada de este miércoles en Texas, pese a que se había argumentado que padecía de cierto retraso mental.
La defensa de Marvin Wilson, de 54 años, alegaba que éste no debía ser ejecutado porque su coeficiente de inteligencia era muy inferior al de una persona normal.
Según la ley, a los prisioneros con retraso mental no se les puede aplicar la pena capital, pero la propia Corte Suprema del país rehusó el martes que fuese prorrogada la ejecución.
Las autoridades de Texas informaron que a Wilson se le ejecutó con una inyección letal en la cárcel de Huntsville.
"Es escandaloso que el estado de Texas siga utilizando criterios no científicos (...) para determinar qué ciudadanos con discapacidad intelectual deben ser exentos de una ejecución", dijo el abogado del reo, Lee Kovarsky.
Wilson estaba en el corredor de la muerte desde que fue sentenciado en 1998 por un asesinato que cometió seis años antes.
En 2004, los médicos llegaron a la conclusión de que Wilson sufría un pequeño retraso mental, y la organización defensora de derechos humanos Amnistía Internacional calificó la sentencia de "perturbadora".
Las pruebas de coeficiente de inteligencia especifican que una persona es normal si obtiene una puntuación superior a 70. La que se le hizo al preso sólo arrojó 61 puntos.
El mes pasado, en un caso similar, la Corte Suprema del estado de Georgia canceló la ejecución de un reo discapacitado dos horas antes de que se llevara a cabo.
La de Wilson es la vigésimo quinta ejecución este año en Estados Unidos, y la séptima en Texas, donde en lo que queda de 2012 hay previstas siete más.
La defensa de Marvin Wilson, de 54 años, alegaba que éste no debía ser ejecutado porque su coeficiente de inteligencia era muy inferior al de una persona normal.
Según la ley, a los prisioneros con retraso mental no se les puede aplicar la pena capital, pero la propia Corte Suprema del país rehusó el martes que fuese prorrogada la ejecución.
Las autoridades de Texas informaron que a Wilson se le ejecutó con una inyección letal en la cárcel de Huntsville.
"Es escandaloso que el estado de Texas siga utilizando criterios no científicos (...) para determinar qué ciudadanos con discapacidad intelectual deben ser exentos de una ejecución", dijo el abogado del reo, Lee Kovarsky.
Wilson estaba en el corredor de la muerte desde que fue sentenciado en 1998 por un asesinato que cometió seis años antes.
En 2004, los médicos llegaron a la conclusión de que Wilson sufría un pequeño retraso mental, y la organización defensora de derechos humanos Amnistía Internacional calificó la sentencia de "perturbadora".
Las pruebas de coeficiente de inteligencia especifican que una persona es normal si obtiene una puntuación superior a 70. La que se le hizo al preso sólo arrojó 61 puntos.
El mes pasado, en un caso similar, la Corte Suprema del estado de Georgia canceló la ejecución de un reo discapacitado dos horas antes de que se llevara a cabo.
La de Wilson es la vigésimo quinta ejecución este año en Estados Unidos, y la séptima en Texas, donde en lo que queda de 2012 hay previstas siete más.