Un exalumno armado irrumpió en una escuela secundaria de St. Louis, Missouri, en la zona central de Estados Unidos, el lunes por la mañana y advirtió: “¡Todos van a morir!”. antes de disparar fatalmente a un maestro y una adolescente, e hiriendo a otros siete antes de que la policía lo matara en un intercambio de disparos.
El ataque justo después de las 9 a.m. en la Escuela Secundaria Central de Artes Visuales y Escénicas obligó a los estudiantes a bloquear las puertas y acurrucarse en las esquinas de las aulas, saltar por las ventanas y salir corriendo del edificio para buscar seguridad. Una niña aterrorizada dijo que estaba cara a cara con el tirador antes de que su arma aparentemente se atascara y ella pudiera salir corriendo.
Hablando en una conferencia de prensa el lunes por la tarde, el jefe de policía Michael Sack identificó al tirador como Orlando Harris, de 19 años, quien se graduó de la escuela el año pasado.
Sack dijo que el motivo aún estaba bajo investigación, pero “hay sospechas de que puede haber alguna enfermedad mental que esté experimentando”. Posteriormente, los investigadores registraron la casa de Harris, dijo Sack.
Las autoridades no nombraron a las víctimas, pero el St. Louis Post-Dispatch identificó a la maestra muerta como Jean Kuczka. Su hija dijo que su madre murió cuando el hombre armado irrumpió en su salón de clases y ella se interpuso entre él y sus alumnos.
“A mi mamá le encantaban los niños”, dijo Abbey Kuczka al periódico. “Ella amaba a sus estudiantes. Sé que sus alumnos la miraban como si fuera su madre”.
Sack dijo que la otra víctima mortal fue una mujer de 16 años que murió en la escuela.
Otros siete estudiantes de 15 y 16 años, cuatro niños y tres niñas, se encuentran en condición estable. Cuatro estudiantes sufrieron heridas de bala o heridas por rasguños, dos sufrieron contusiones y uno tenía un tobillo roto.
Sack se negó a decir cómo Harris pudo ingresar al edificio, que tiene guardias de seguridad, puertas cerradas con llave y detectores de metales.
“Si hay alguien que tiene un testamento, se va a dar cuenta, no queremos ponérselo fácil”, dijo Sack. “Simplemente tenemos que hacer lo mejor que podamos para extender el tiempo que les toma ingresar al edificio para ganarnos tiempo para responder”.
Harris tenía el arma en la mano cuando llegó a la escuela y “no había ningún misterio sobre lo que iba a pasar. Lo sacó y entró de una manera agresiva y violenta”.
Harris tenía casi una decena de cargadores de municiones de alta capacidad con él, dijo Sack. “Eso es un montón de víctimas. ... Ciertamente es trágico para las familias y es trágico para nuestra comunidad, pero podría haber sido mucho peor”.
También lea ¿Es posible detener un tiroteo masivo? se preguntan los estadounidensesUna estudiante, Taniya Gholston de 16 años de edad, dijo al St. Louis Post-Dispatch que estaba en un aula cuando el agresor entró.
“Todo lo que escuché fueron dos disparos y entró con un arma”, comentó Gholston. “Trataba de correr pero no podía. Hicimos contacto visual pero logré salir porque su pistola se atascó. Pero vimos sangre en el piso”, añadió.
Otra estudiante, Nylah Jones, de noveno grado, dijo al Post-Dispatch que estaba en la clase de matemáticas cuando el agresor disparó al aula desde el pasillo. El tirador no pudo entrar en el aula y golpeó la puerta mientras los estudiantes se amontonaban en una esquina, dijo.
Los informes de televisión dijeron que los oficiales entraron en la zona con armas de fuego poco después de las 9 a.m. Se colocó cinta de crimen alrededor de la escuela y algunos padres llegaron a recoger a los niños y comprobar si estaban a salvo. El distrito tuiteó que los estudiantes podrían ser recogidos en otro edificio de la escuela o una tienda de comestibles cercana.
[Con información de The Associated Press y Agence France Press]
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