El tratamiento que ha dado Donald Trump a las mujeres a través de los años —las ejecutivas que ha contratado en su negocio de bienes raíces y las hermosas mujeres que ha buscado, las “misses” a las que ha entrevistado— está siendo revisado minuciosamente por la prensa estadounidense ahora que es el presunto nominado republicano.
Dos de los periódico más prestigiosos, el Washington Post y el New York Times, publicaron historias en días recientes que muestran en detalle sus relaciones pasadas con las mujeres.
Después de todo, las mujeres constituyen la mayor parte del electorado al que Trump debe tratar de convencer en noviembre para ganar a su probable rival, Hillary Clinton, que se presume ganará la nominación demócrata.
El Post reveló primero que Trump se hizo pasar en ocasiones como su propio publicista, a menudo identificándose como “John Miller” o “John Barron”, solo para ufanarse de su encanto con las mujeres mientras estaba casado con la primera de sus tres esposas, Ivana Trump.
Este fin de semana, el Times revela también en un artículo un patrón de comportamiento a menudo perturbador del precandidato republicano.
El Times, que dice que basó su artículo en más de 50 entrevistas, citó a mujeres que relataron episodios en que Trump las trató como objetos sexuales e hizo comentarios sobre sus cuerpos.
Algunas dijeron, por el contrario, que Trump las estimuló en sus carreras y las promovió dentro de sus empresas, a menudo en cargos en que solían ser excluidas.
Al ser consultado sobre los incidentes menos halagüeños descritos en el artículo, Trump negó que hubieran ocurrido o cuestionó los detalles, según dijo el diario.
"Muchas cosas se inventan al pasar los años. Siempre he tratado a las mujeres con gran respeto", declaró Trump al Times.
Durante los debates de la etapa de primarias, Trump tuvo comentarios despectivos contra al menos una periodista, artistas y rivales femeninas. Recientemente dijo que Hillary era candidata solo porque era mujer.