Trump visita El Paso y Dayton tras tiroteos mortales

Durante una declaración en la Casa Blanca, el presidente Donald Trump calificó de "malvados ataques" los tiroteos ocurridos, y dijo a los estadounidenses que deben "condenar el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca".

El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, abordará el Air Force One el miércoles para visitar El Paso, Texas, y Dayton, Ohio, luego de dos tiroteos el fin de semana que dejaron 31 muertos y decenas de heridos.

Legisladores locales y residentes se oponen a la visita de Trump, cuando muchos culpan a su retórica y a sus políticas sobre la inmigración por los trágicos sucesos que enlutaron al país.

Funcionarios de la Casa Blanca dijeron que las visitas de Trump serían similares a las que realizó a otras comunidades en duelo después de tiroteos masivos, incluidos Parkland, Florida y Las Vegas, Nevada, donde el presidente y la primera dama saludaron a los socorristas y pasaron tiempo con familias de luto y sobrevivientes.

"Lo que quiere hacer es ir a estas comunidades y hacer el luto con ellas, rezar con ellas, ofrecerles sus condolencias y, sinceramente agradecer a los socorristas que arriesgaron sus vidas y fueron capaces de eliminar al agresor rápidamente'', dijo el martes el portavoz de la Casa Blanca, Hogan Gidley. Agregó que Trump también quiere “tener una conversación'' sobre formas de evitar futuros episodios mortales.

Pero las visitas planificadas resaltan la ambivalencia de algunos que cuestionan si Trump, debido a su retórica a menudo incendiaria, tiene la legitimidad para sanar a las comunidades en duelo.

Gidley rechazó el martes las críticas al presidente. "No es culpa del político cuando alguien actúa con su mala intención", dijo el portavoz de la Casa Blanca.

La alcaldesa demócrata de Dayton, Nan Whaley, dijo que si bien estaba decepcionada con los comentarios de Trump luego de los tiroteos, sin embargo le daría la bienvenida al presidente a su ciudad, con la esperanza de que su visita "agregue valor y ayude a nuestra comunidad".

En El Paso, algunos residentes y legisladores demócratas locales dijeron que el presidente no era bienvenido y lo instaron a mantenerse alejado. Beto O'Rourke, un candidato a la nominación presidencial demócrata para 2020 que anteriormente representó a El Paso en el Congreso, dijo que los comentarios de Trump condujeron directamente a la masacre del sábado pasado y pidió a Trump que renuncie a su viaje planeado a la ciudad.

Sin embargo, el alcalde de El Paso, Dee Margo, dijo que dará la bienvenida a Trump a la ciudad a su llegada. "Es el presidente de Estados Unidos. Entonces, en esa calidad, cumpliré con mis obligaciones como alcalde de El Paso de reunirme con el presidente y discutir cuáles son nuestras necesidades en esta comunidad", dijo.

Las visitas presidenciales a las dos ciudades también se producen en medio de los crecientes llamados para que el Senado de EE.UU., controlado por los republicanos, vote sobre la legislación aprobada por la Cámara de Representantes, de mayoría demócrata, que incluye verificaciones de antecedentes para todos los compradores de armas, incluidos los que están en Internet o en las exhibiciones de armas.

Medios informaron que han sido planeadas protestas de quienes se oponen a la visita de Trump a ambas ciudades.

Trump: El odio no tiene lugar en EE.UU.

Durante un discurso el lunes en la Casa Blanca, el mandatario calificó de "malvados ataques" los tiroteos ocurridos, y dijo a los estadounidenses que deben "condenar el racismo, la intolerancia y la supremacía blanca".

Trump expresó que actuará con una resolución urgente, tras la muerte de 31 personas y los más de 40 heridos como resultado de los dos ataques ocurridos el fin de semana. Informó que ha indicado a las autoridades federales que ayuden en las investigaciones en curso.

"Estas siniestras ideologías deberían ser derrotadas", dijo Trump en la Casa Blanca, junto al vicepresidente Mike Pence. "El odio no tiene lugar en Estados Unidos. El odio deforma la mente, devasta el corazón y devora el alma", declaró.

Trump citó una variedad de razones para las masacres, incluidas las enfermedades mentales y los videojuegos violentos, y pidió la aprobación de una ley llamada "bandera roja" que autoriza a las autoridades locales a confiscar armas de fuego a la persona que un juez considera que representa un riesgo de violencia.

Pero ignoró el fácil acceso a las armas en Estados Unidos, especialmente las armas de asalto de alto poder como las utilizadas en la masacre de Dayton, donde murieron nueve personas, incluida la presunta hermana del pistolero, en un popular club nocturno el domingo por la mañana. Horas antes, más personas fueron asesinadas a tiros en una tienda de Walmart en El Paso.

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Revisión de antecedentes

El presidente Trump pidió también el lunes a los congresistas estadounidenses que aprueben una ley que exija estrictas revisiones de antecedentes para las compras de armas de fuego.

"No podemos permitir que los asesinados en El Paso, Texas y Dayton, Ohio, mueran en vano. Del mismo modo para los heridos tan graves. Nunca podemos olvidarlos, ni a los que murieron antes que ellos", escribió Trump en Twitter previo a su comparecencia desde la Casa Blanca.

"Los republicanos y los demócratas deben unirse y obtener fuertes verificaciones de antecedentes, tal vez uniendo esta legislación con una reforma migratoria que se necesita desesperadamente. ¡Debemos tener algo bueno, si no es GENIAL, de estos dos trágicos eventos!", escribió Trump.

​El líder de la minoría en el Senado, Chuck Schumer, aseguró esta semana que el líder de la mayoría Mitch McConnell está bloqueando reformas sobre el tema de las armas.

Pidió a McConnell “presentar ante el Senado una sesión de emergencia para tomar medidas inmediatas” sobre el proyecto de ley que ya fue aprobado por la Cámara de Representantes, que requeriría verificaciones de antecedentes federales para toda venta y transferencia de armas de fuego.

Schumer y la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, indicaron que al omitir la verificación de antecedentes en su mensaje, Trump ya se estaba retractando de la propuesta en su tuit.