Turquía sanciona a Francia

Integrantes de lc omunidad franco-turca realizaron protestas cerca del parlamento en París.

Francia reconoció formalmente el genocidio de los armenios en 2001, pero no había impuesto ninguna sanción para quien no lo reconociera.

El gobierno de Turquía respondió enfurecido al voto del parlamento de Francia que convierte en crimen la negación del genocidio provocado por el asesinato en masa de armenios durante la era del Imperio Otomano en Turquía, hace casi un siglo.

El primer ministro turco Recep Tayyip Erdogan acusó este viernes 23 de diciembre de 2011, a Francia de cometer genocidio en Argelia hace más de 60 años. Ergodan dijo que los colonialistas franceses masacraron el 15% de la población argelina a partir de 1945.

Por su parte, el presidente de Turquía, Abdullah Gul, dijo que su contraparte de Francia, Nicolas Sarkozy, tiene “prejuicios” contra Turquía.

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Francia lamentó la reacción de Turquía respecto a la medida aprobada en la cámara baja del parlamento francés.

La medida establece que cualquier persona que niegue el asesinato masivo de armenios por las fuerzas otomanas como un genocidio, enfrentará multas de $60.000 euros y más de un año en la cárcel.

La legislación pasó ahora al Senado de Francia para su consideración.

Francia reconoció formalmente el genocidio de los armenios en 2001, pero no había impuesto ninguna sanción para quien no lo reconociera.

Los armenios sostienen que 1 millón y medio de armenios fueron asesinados durante la Primera Guerra Mundial por las tropas turcas del Imperio Otomano, en lo que los historiadores definen como una de las peores masacres del siglo XX.

Turquía por su parte ha reconocido las pérdidas de vidas de armenios, pero dice que la cifra es exagerada y no es suficiente para ser considerada un genocidio, y sostiene además que las muertes fueron el resultado de una guerra civil.

A la vez, el primer ministro Erdogan dijo este viernes 23 de diciembre que la medida aprobada en Francia es un claro ejemplo de racismo, la discriminación y el sentimiento antimusulmán a alcanzo nuevos altos niveles en Francia y Europa.

El gobierno de Tuquía llamó a su embajador en Francia para que regrese al país y prohibió a las naves de la armada francesa el uso de las aguas territoriales turcas, a la vez que impuso restricciones a los aviones militares franceses en el uso de su espacio aéreo.

También Erdogan acusó a Sarkozy de intententar contentar a cientos de miles de ciudadanos franceses de origen armenio, de cara a su reelección en las elecciones de 2012.

Las relaciones entre Francia y Turquía, ambos miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), se han enfriado desde que Francia se opuso a la candidatura de Turquía para integrarse a la Unión Europea.