Un reciente investigación de la Institución Brookings encontró que para fines de 2014 habían al menos 46.000 cuentas de Twitter relacionadas con simpatizantes del Estado islámico, pero alertaron que no todas están relacionadas directamente con la agrupación terrorista.
Los autores JM Berger y Jonathon Morgan dijeron que el análisis de los esfuerzos en redes sociales de militantes del EI, necesitan ir más allá del núcleo principal de la organización también conocida como ISIS.
Según el nuevo análisis un gran número de simpatizantes del EI están en Arabia Saudita, seguida por Siria, Irak y Estados Unidos.
Además encontró que uno de cada cinco de los partidarios del grupo escriben en inglés y tres cuartas partes en árabe y que este tipo de cuentas tiene un promedio de 1.000 seguidores, más que la mayoría de usuarios de Twitter, y las que mandaron mensajes más seguido y obtuvieron más seguidores fueron en su gran parte suspendidas.
Esta investigación coincide con un advertencia que hizo EE.UU. ante el aumento de jóvenes estadounidenses que se dejan interceptar por grupos extremistas, en su mayoría a través de internet.
También se produce en el contexto de que Twitter recibió una amenaza directa del Estado islámico por haber cancelado varias cuentas en esta red social.
Los autores recomendaron finalmente que las empresas de redes sociales y el gobierno de Estados Unidos "deben trabajar juntos para dar una respuesta adecuada a los extremistas".