El embajador del gobierno de Juan Guaidó, el presidente encargado de Venezuela, solicitó a las autoridades estadounidenses recuperar la embajada de su país en Washington, tomada desde hace varias semanas por seguidores del presidente en disputa Nicolás Maduro.
Carlos Vecchio escribió en Twitter que ha dado su consentimiento a las autoridades respectivas para el desalojo de los activistas.
Unos 50 activistas de "Code Pink", un grupo liberal antiguerra se niega a abandonar la embajada prometiendo proteger el edificio de lo que llama "una toma hostil", en tanto que el Departamento de Estado los califica de "intrusos" y les pide abandonar la instalación.
Los activistas a favor de Nicolás Maduro, duermen dentro de la embajada para evitar que sea ocupada por el equipo del encargado de negocios de Venezuela en Estados Unidos designado por Juan Guaidó.
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En los últimos días, los activistas de Code Pink y un número cada vez mayor de seguidores de Guaidó que desde el martes han llegado a la legación se han enfrentado afuera de la embajada. Al menos cuatro personas habían sido detenidas hasta el sábado.
"Creemos que el gobierno electo y el gobierno que tiene el poder y el gobierno reconocido por las Naciones Unidas es el gobierno de Maduro, y merecen tener su embajada aquí", dijo a Fox News, la cofundadora de Code Pink, Medea Benjamin, afuera de la embajada en el vecindario de Georgetown, en la capital estadounidense. "Es por eso que hemos estado aquí".
Los manifestantes pro Guaidó están fuera de la embajada con carteles como "Venezuela quiere democracia, no otra Cuba". Fox News informa que en entrevistas con estos manifestantes, ellos enfatizaron que son de Venezuela, a diferencia de muchos de los manifestantes de Code Pink'.
"Esas personas allí mismo, no son venezolanas. No tienen pasaporte. No tienen nuestras identificaciones ", dijo Clemente Piñate, de 32 años, quien dijo que es venezolano y que llegó a Estados Unidos cuando tenía 12 años.
Los diplomáticos acreditados por el gobierno de Maduro salieron del edificio hace más de una semana, y desde entonces el lugar se ha convertido en escenario de una enconada disputa entre ambos grupos.
La Policía de Washington D.C. y la unidad de Misiones Extranjeras de la División Uniformada del Servicio Secreto que patrulla lugares diplomáticos han estado presentes todo este tiempo en el distrito de la embajada de Venezuela, vigilando los desarrollos y protegiendo la seguridad pública durante las manifestaciones en curso.