Colombia: Niños venezolanos acompañan a sus padres en la lucha por la supervivencia
Cada día, más de 30,000 peatones cruzan de Venezuela a Colombia. En el peaje de Los Patios, en Cúcuta, se ven a familias que llevan bebés y niños pequeños. Van en busca de oportunidades en los países vecinos. (Foto: Diego Huertas)
Incluso los pequeños deben caminar larhas distancia y llevar parte de sus pertenencias a sus espaldas. Sus familias van a busca de una nueva vida. (Foto: Diego Huertas)
Todos los días, el personal de centro de salud Las Margaritas atiende de 100 a 120 niños. (Foto: Diego Huertas)
Este centro de salud está ubicado a la vuelta de la esquina de la frontera entre Colombia y Venezuela. (Foto: Diego Huertas)
Algunas familias tardan hasta 12 horas en llegar desde Venezuela, donde la medicina es escasa o demasiado cara. (Foto: Diego Huertas)
El centro para la migración internacional Scalabrini, en Cúcuta, el desayuno, el almuerzo y la cena para cada residente están garantizados durante todos los días de su estadía. (Foto: Diego Huertas)
El centro tiene capacidad para 70 personas y cuenta con dos habitaciones, una para hombres y otra para mujeres. (Foto: Diego Huertas)
Los beneficiarios colaboran con las tareas necesarias en el recinto. (Foto: Diego Huertas)
En el cruce hombres y mujeres jóvenes, y ancianos, que llevan a sus espaldas maletas llenas de ropa, mantas, o cualquier cosa que puedan cargar. (Foto: Diego Huertas)
El puente Francisco de Paula es una de las vías de acceso a Colombia más transitadas por los venezolanos. (Foto: Diego Huertas)
Cúcuta es la ciudad donde miles de migrantes venezolanos obtienen alimentos, medicinas y otros productos básicos que ya no están disponibles en Venezuela. (Foto: Diego Huertas)
La mayoría de los que cruzan el puente están en viajes de compras de subsistencia. (Foto: Diego Huertas)
Mujeres y hombres cargan a sus espaldas los productos que lograron conseguir para sostener a su familia o vender a sus coterráneos. (Foto: Diego Huertas)
Pero muchos se están uniendo al éxodo de millones que han renunciado a su tierra natal y emigraron a otros lugares en los últimos años. (Foto: Diego Huertas)
Colombia es uno de los destinos más frecuentes para los migrantes venezolanos, por la cercanía geográfica y por la política de acogida de ese gobierno. (Foto: Diego Huertas)
En el Puente Internacional Simón Bolívar, los venezolanos pueden obtener efectivo por trozos de oro o plata, e incluso cabello. (Foto: Diego Huertas)
En el lado colombiano, el mercado callejero tiene vendedores que ofertan papas, pañales, papel higiénico, llantas y cigarrillos venezolanos, entre otros artículos. (Foto: Diego Huertas)
El peaje Los Patios, en Cúcuta es la primera parada para los caminantes después de ingresar a Colombia. (Foto: Diego Huertas)
La pequeña estación de la Cruz Roja en la autopista 55 en Los Patios, a pocos kilómetros a pie del puente Simón Bolívar, está abierta las 24 horas. (Foto: Diego Huertas)
Cruzan a Cúcuta, Colombia, a pie, con el sol castigándolos, para luego escalar altas montañas bajo temperaturas frías, lluvias torrenciales y caminos sinuosos. (Foto: Diego Huertas)
Algunos se dirigen a pueblos cercanos en busca de trabajo, otros viajan a las grandes ciudades de Colombia, como Bogotá (caminando 563 km o 350 millas) y Medellín (595 km o 370 millas). (Foto: Diego Huertas)
La insulina y los medicamentos para las enfermedades respiratorias tienen una gran demanda en la clínica. (Foto: Diego Huertas)
Cada espacio tiene baños y duchas con cabañas compartidas. (Foto: Diego Huertas)
Gracias a la gestión con instituciones locales e internacionales, el centro también cuenta con 7 habitaciones individuales con baño privado, para grupos familiares que llegan al centro de migración. (Foto: Diego Huertas)