Venezuela no extradita

El Partido Comunista de Venezuela (PCV), se mostró satisfecho por la decisión, tras algunas diferencias con el gobierno del presidente Hugo Chávez del cual es aliado político.

La extradición de Venezuela a Colombia de Guillermo Torres Cueter, alias "Julián Conrado", considerado como miembro del estado mayor de las rebeldes Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), “no procede", decidió la Fiscalía General venezolana.

El gobierno de Colombia había solicitado la extradición de “Julián Conrado”, quien fue detenido en mayo de 2011 en el suroccidental estado Barinas en Venezuela, sin embargo, la Fiscal General del Ministerio Público, Luisa Ortega Díaz, informó que el proceso de extradición del guerrillero colombiano no procede por ser extemporáneo.

También Ortega adujo no haber recibido las pruebas de los delitos de los que le acusa Colombia.

En cambio Ortega dijo a la estatal Venezolana de Televisión (VTV) que "sí, recibimos la solicitud de extradición. Ya nosotros emitimos opinión no sé si se ha realizado la audiencia, ya el Ministerio Público consignó la opinión y considera que la extradición no procede".

"El motivo de la solicitud de extradición es distinto a los delitos por los cuales se le está requiriendo. Entonces no nos remiten elementos de pruebas", advirtió Ortega, quien agregó que Colombia no ha respondido a los antecedentes solicitados y que Venezuela no extradita a nadie por un delito que contempla la pena de muerte.

A pesar de que en otros casos la justicia de Venezuela se ha mostrado renuente y lenta ante pedidos por motivos de salud de los detenidos, en este caso en particular la fiscal Ortega dijo que en breve enviará un funcionario al lugar de reclusión de Torres para verificar su estado de salud.

La fiscal aduce que ha recibido varias informaciones de que el miembro de la FARC, quien es requerido por la justicia colombiana por homicidio, secuestro y rebelión, tiene algunos problemas de salud.

El Partido Comunista de Venezuela (PCV), se mostró satisfecho por la decisión, tras algunas diferencias con el gobierno del presidente Hugo Chávez del cual es aliado político.

Torres era requerido por Estados Unidos que ofreció $2,5 millones de dólares por información que llevara a su captura, e incluso el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos había elogiado la captura.

Aún no se conoce una reacción de Colombia, pero se estima que la decisión puede generar diferencias con Venezuela.