De siete personas asesinadas durante las manifestaciones ocurridas en Venezuela desde el 12 de febrero, cinco recibieron tiros en el cráneo, una en la cara y otra murió de golpes en la cabeza.
El número de fallecidos en las protestas en Venezuela que duran ya más de dos semanas puede y ha sido motivo de debate, pero el objetivo de los disparos cada vez es más claro: disparar a matar.
Según el periódico El Nacional, de siete personas asesinadas durante las manifestaciones ocurridas desde el 12 de febrero, cinco recibieron tiros en el cráneo, a otra le dispararon con escopeta de perdigones a la cara y otra murió de golpes en la cabeza.
Génesis Carmona, la Miss Turismo Carabobo 2013 y estudiante de Mercadeo, por ejemplo, murió de un balazo en la cabeza cuando un grupo de motorizados se acercó a una manifestación en Valencia. Un día antes, el gobernador de ese estado había convocado a sus adeptos vía Twitter a un “ataque fulminante” contra “los fascistas”.
El hallazgo parece echar por la borda las afirmaciones del gobierno, de que los cuerpos de seguridad –y aunque no lo reconoce, los paramilitares armados—solo han buscado dispersar a los manifestantes y hacer cumplir la ley.
El lunes por la noche, el presidente Nicolás Maduro aseguró que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) ha actuado apegada a la ley.
"Si no fuera por la Guardia no tuviéramos la paz, de la que hoy gozamos, en más del 90% del territorio porque se la han jugado por la paz con mucha paciencia, escuchando insultos de estos grupos violentos", dijo el mandatario.
Pero como dice el criminólogo y abogado Javier Gorriño, citado por El Nacional, no es que la GNB esté lanzando perdigones al aire, sino en contra de personas. “Se busca herirlas en las zonas vulnerables del cuerpo”, afirma.
Otro entrevistado por el periódico, el general retirado Miguel Aparicio, apunta al propio presidente Nicolás Maduro, que con frecuencia ha mencionado que las protestas son parte de un plan para ejecutar un golpe de estado con la ayuda de Estados Unidos.
“Mientras el gobierno avale la tesis de golpe de Estado, estará avalando que la GNB y los grupos armados enfrente a los manifestantes como golpistas” dice el General.
Según el periódico El Nacional, de siete personas asesinadas durante las manifestaciones ocurridas desde el 12 de febrero, cinco recibieron tiros en el cráneo, a otra le dispararon con escopeta de perdigones a la cara y otra murió de golpes en la cabeza.
Génesis Carmona, la Miss Turismo Carabobo 2013 y estudiante de Mercadeo, por ejemplo, murió de un balazo en la cabeza cuando un grupo de motorizados se acercó a una manifestación en Valencia. Un día antes, el gobernador de ese estado había convocado a sus adeptos vía Twitter a un “ataque fulminante” contra “los fascistas”.
El hallazgo parece echar por la borda las afirmaciones del gobierno, de que los cuerpos de seguridad –y aunque no lo reconoce, los paramilitares armados—solo han buscado dispersar a los manifestantes y hacer cumplir la ley.
El lunes por la noche, el presidente Nicolás Maduro aseguró que la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) ha actuado apegada a la ley.
"Si no fuera por la Guardia no tuviéramos la paz, de la que hoy gozamos, en más del 90% del territorio porque se la han jugado por la paz con mucha paciencia, escuchando insultos de estos grupos violentos", dijo el mandatario.
Pero como dice el criminólogo y abogado Javier Gorriño, citado por El Nacional, no es que la GNB esté lanzando perdigones al aire, sino en contra de personas. “Se busca herirlas en las zonas vulnerables del cuerpo”, afirma.
Otro entrevistado por el periódico, el general retirado Miguel Aparicio, apunta al propio presidente Nicolás Maduro, que con frecuencia ha mencionado que las protestas son parte de un plan para ejecutar un golpe de estado con la ayuda de Estados Unidos.
“Mientras el gobierno avale la tesis de golpe de Estado, estará avalando que la GNB y los grupos armados enfrente a los manifestantes como golpistas” dice el General.