El secretario de Tesoro de Estados Unidos, Steven Mnuchin, dijo el jueves que las sanciones impuestas a países como Venezuela, Siria o Corea del Norte no impiden que se brinde la asistencia humanitaria necesaria para abordar la pandemia del coronavirus.
“Los programas de sanciones estadounidenses permiten en todo momento que se brinde asistencia humanitaria, incluidos medicamentos, dispositivos médicos, equipos y productos agrícolas”, dijo Mnuchin en un comunicado.
"Ante la pandemia global de la COVID-19, tenemos absolutamente presente la necesidad de que esta ayuda llegue a las personas”, agregó.
Estados Unidos ha impuesto sanciones tanto contra el Gobierno en disputa de Venezuela como a la industria petrolera venezolana, el sector más importante en el país, que depende en un 90% de la venta del crudo para sus ingresos.
El presidente en disputa de Venezuela, Nicolás Maduro, pidió el domingo en una carta difundida en redes sociales y dirigida al “pueblo de los Estados Unidos” que se levantaran las “sanciones ilegales” hacia su gobierno.
“El bloqueo restringe el acceso a insumos humanitarios, tan necesarios hoy en el país”, escribió el líder chavista.
El jueves, la Organización Mundial de Salud (OMS) y Rusia enviaron 90 toneladas de ayuda humanitaria, como pruebas rápidas de COVID-19, camas y concentradores de oxígeno, que fueron recibidos por funcionarios del Gobierno en disputa de Maduro, según informó la cancillería del país.
Ante el avance de la pandemia, la alta Comisionada para los Derechos Humanos de la ONU, Michelle Bachelet, pidió a finales de marzo que se levantaran las sanciones a varios países, entre ellos Venezuela.
Aunque la precariedad del sistema de salud en Venezuela viene de antes de que se impusieran las sanciones, escribió Bachelet, aliviarlas “podría significar que más recursos sean destinados a tratar y prevenir la epidemia”.