La organización independiente que vela por los derechos humanos y la democracia considera que la invitación es sólo “simbólica” y no permite que el proceso de votación sea evaluado.
El Centro Carter, una organización independiente que vela por los derechos humanos, la resolución de conflictos y la democracia en el mundo, rechazó una invitación del Consejo Electoral Nacional (CNE) de Venezuela para observar las elecciones presidenciales del 7 de octubre, por considerar que la invitación es sólo “simbólica” y no permite que el proceso de votación sea evaluado.
El Centro –fundado y dirigido por el ex presidente estadounidense Jimmy Carter— dijo en un comunicado que “el concepto de acompañamiento difiere de la observación (electoral) en que el propósito del acompañamiento es el de invitar a personas extranjeras a ser testigos durante el día de la elección y a tener una presencia política más que todo simbólica, mientras que el propósito de la observación es la de invitar a las organizaciones internacionales a evaluar de manera comprehensiva un proceso electoral para resaltar la integridad del proceso de votación, contribuir a la confianza de los votantes y de informar a la comunidades internacional y local”.
En el comunicado, el Centro Carter establece que la organización se suscribe “a los atributos y limitaciones de los observadores electorales internacionales establecidas en la Declaración de Principios de la Observación Internacional Electoral” y como las condiciones no están dadas en Venezuela para trabajar libremente, no puede aceptar la invitación.
Otras observadores internacionales como los de la Organización de Estados Americanos y de la Unión Europea tampoco estarán presentes o bien porque no han sido invitados o porque tampoco pueden aceptar las limitaciones para hacer su trabajo.
El CNE permite el acompañamiento internacional pero no la observación y aunque el Consejo invitó al Centro Carter a enviar un “equipo técnico” para participar en algunas auditorías preliminares y a tener presencia el día de la votación, el Centro dijo que la invitación llegó demasiado tarde para aceptarla.
El Centro –fundado y dirigido por el ex presidente estadounidense Jimmy Carter— dijo en un comunicado que “el concepto de acompañamiento difiere de la observación (electoral) en que el propósito del acompañamiento es el de invitar a personas extranjeras a ser testigos durante el día de la elección y a tener una presencia política más que todo simbólica, mientras que el propósito de la observación es la de invitar a las organizaciones internacionales a evaluar de manera comprehensiva un proceso electoral para resaltar la integridad del proceso de votación, contribuir a la confianza de los votantes y de informar a la comunidades internacional y local”.
En el comunicado, el Centro Carter establece que la organización se suscribe “a los atributos y limitaciones de los observadores electorales internacionales establecidas en la Declaración de Principios de la Observación Internacional Electoral” y como las condiciones no están dadas en Venezuela para trabajar libremente, no puede aceptar la invitación.
Otras observadores internacionales como los de la Organización de Estados Americanos y de la Unión Europea tampoco estarán presentes o bien porque no han sido invitados o porque tampoco pueden aceptar las limitaciones para hacer su trabajo.
El CNE permite el acompañamiento internacional pero no la observación y aunque el Consejo invitó al Centro Carter a enviar un “equipo técnico” para participar en algunas auditorías preliminares y a tener presencia el día de la votación, el Centro dijo que la invitación llegó demasiado tarde para aceptarla.