Venezuela expulsa a tres diplomáticos de EE.UU.

El presidente venezolano Nicolás Maduro habla durante una cadena nacional desde el palacio de Miraflores.

Maduro reacciona furioso a los comentarios del secretario de Estado, John Kerry, en los que defiende al líder opositor Leopoldo López, contra quien hay una orden de arresto.
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ha ordenado la expulsión de tres funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Caracas luego de que Washington salió en defensa del líder opositor Leopoldo López.

El secretario de Estado, John Kerry, dijo el sábado que la orden de arresto en contra de López tiene un efecto preocupante sobre los derechos de los ciudadanos venezolanos a expresar pacíficamente sus desavenencias.

“Nos unimos a los llamados del Alto comisionado para los Derechos Humanos de la ONU, el Secretario General de la Organización de los Estados Americanos, el Alto Representante para las Relaciones Exteriores de la Unión Europea y de otros, en condenar esta violencia sin sentido”, lee en un parte el comunicado firmado por Kerry.

Una historia de expulsiones

Una historia de expulsiones

En octubre del año pasado Maduro expulsó a Kelly Keiderling, encargada de negocios de la Embajada de Estados Unidos en Caracas, y a otras dos funcionarias, alegando que estaban en supuestas actividades de conspiración.

El gobernante también expulsó en marzo a dos agregados militares estadounidenses, a quienes acusó tratar de establecer contacto con oficiales activos venezolanos para, presuntamente, adelantar planes de desestabilización del gobierno del país.

Washington respondió de manera recíproca a las acciones de Caracas y también expulsó a cinco funcionarios diplomáticos venezolanos.

Venezuela y Estados Unidos han mantenido tirantes relaciones y, desde 2010, ambos países están sin embajadores.
Maduro consideró que las expresiones del secretario Kerry son “insolencias”, y denunció que un alto funcionario estadounidense le notificó al embajador de Venezuela en la ONU, Roy Chaderton, las “exigencias” de dialogar y detener la orden de captura contra López, quien hasta el momento no ha sido arrestado.

"Estas son exigencias inaceptables, insolentes”, dijo Maduro en su discurso del domingo. “En Venezuela estamos dispuestos a llegar hasta las últimas consecuencias en defensa de la democracia… Yo no recibo órdenes de nadie en este mundo", sentenció.

Sobre los diplomáticos que serían expulsados, cuyos nombres no han sido publicados, Maduro dijo que "ya tenemos dos meses viéndolos en las universidades haciendo reuniones; el cuento que tienen es ofrecer visas", manifestó. "Que se vayan a conspirar a Washington. Qué dejen quieta a Venezuela".

Las autoridades intentan detener a López a quien acusan de organizar las protestas anti-gubernamentales que terminaron violentamente el miércoles de la semana pasada. Tres personas murieron en las mismas, incluyendo dos manifestantes.

Maduro ha dicho que López es un "fascista" y un "cobarde", y le ha urgido a que se entregue.

Las autoridades venezolanas usaron gas lacrimógeno y cañones de agua en contra de cientos de estudiantes que se protestaron nuevamente el viernes contra la creciente inflación, la escasez en los supermercados y el crimen rampante.