Se espera que un juez en Aruba decida si Hugo Carvajal, ex jefe de la inteligencia militar venezolana y confidente cercano del difunto presidente Hugo Chávez, permanecerá tras las rejas en espera de una solicitud de extradición por cargos de narcotráfico impuesta por EE.UU.
Carvajal fue arrestado el miércoles al llegar al aeropuerto de Aruba. Las autoridades estadounidenses afirman que es uno de varios altos funcionarios militares y policiales venezolanos que proporcionaron refugio a los principales narcotraficantes de la vecina Colombia, y les ayudaron a exportar grandes cantidades de cocaína destinada a Estados Unidos a través de Venezuela.
En Venezuela afirman que Carvajal estaba en Aruba para asumir funciones diplomáticas y por ello contaría con inmunidad.
"Esos funcionarios de nuestro consulado y de otros, desde el momento en que llegaron comenzaron a activarse, a ejercer sus cargos y un año o dos años después, fue que se formalizo la relación", dijo el viceministro venezolano para Europa, Calixto Ortega, en declaraciones publicadas por el periódico venezolano El Universal.
La detención de Carvajal está iluminando lo que se conoce en Venezuela como el “Cartel de los Soles”, una referencia a los oficiales militares de alto rango que se enriquecieron traficando drogas. Los oficiales venezolanos llevan un sol en las insignias de sus uniformes.
El presidente Nicolás Maduro amenazó con tomar represalias contra Aruba, a sólo 20 kilómetros de la costa de Venezuela, a menos que se libere Carvajal.
El 25 de julio, El Universal informó que una orden del Instituto Nacional de Aeronáutica Civil (INAC) suspendió los vuelos hacia Aruba, Curazao, Bonaire, Sint Marteen y demás antillas holandesas. Posteriormente se informó que la suspensión fue levantada.
La suspensión afectaba "todo correo, servicio público especializado de transporte por vía aérea, carga y correo, servicio especializado de transporte aéreo y operaciones de aviación general".
El presidente comparó anteriormente la detención de Carvajal a una “emboscada” y un “secuestro” que viola el derecho internacional, ya que había sido nombrado cónsul del país a la isla caribeña.
Los fiscales en Aruba dicen que aunque Carvajal portaba un pasaporte diplomático, no tiene derecho a la inmunidad porque todavía no había sido acreditado por los Países Bajos.