El debate sobre la política de Estados Unidos hacia Venezuela ha cobrado fuerzas en los últimos días, en parte debido a acontecimientos recientes, como la publicación el martes del libro de memorias de John Bolton, el exasesor de Seguridad Nacional del gobierno de Estados Unidos.
El texto titulado “La habitación donde ocurrió”, de 577 páginas, salió a la venta pese a los intentos del presidente Donald Trump de bloquear su publicación por considerar que revela información clasificada.
El libro de Bolton cuenta con un capítulo dedicado exclusivamente a la gestión del ejecutivo estadounidense en el caso de Venezuela. Eso, unido a declaraciones recientes de Bolton a medios en las que, por ejemplo, cuestiona la política exterior de la Casa Blanca, están generando comentarios entre la diáspora venezolana.
El debate se ha movido también por recientes declaraciones del presidente Trump, en las que ha manifestado que habría pensado reunirse con el presidente en disputa de Veenzuela, Nicolás Maduro, aunque ha asegurado luego que lo haría solo para negociar su salida pacífica del poder.
La Voz de América conversó con el subsecretario adjunto de Defensa para América Latina entre 2009 y 2013, Frank Mora, quien fungió en el cargo durante el mandato de Barack Obama. Mora dijo que las revelaciones de Bolton sobre la cuestión venezolana reflejan que “el presidente (Trump) no tiene principios”.
“Es bastante preocupante porque el presidente no ha demostrado coherencia. No hay una estrategia y no hay nada confiable en cuanto al tema de Venezuela”, expresó.
La VOA conversó también con Ernesto Ackerman, uno de los líderes del exilio venezolano, quien participó en el pasado en una reunión preparada por la administración Trump y a la que asistió el secretario de Estado, Mike Pompeo, para discutir las medidas que debía imponer la Casa Blanca contra Nicolás Maduro: "Hay que tener cuidado con este socialismo que nos quieren imponer en este país y tenemos que ser más conscientes y menos inocentes cuando vemos este tipo de declaraciones”.
Ackerman considera incluso que detrás de todo esto hay un interés puramente económico y de desestabilización de cara a las próximas elecciones presidenciales.
“Si Bolton dice que va a escribir de lo bien que le fue con el presidente Trump, nadie hubiera comprado ese libro. A él ya le dieron un millón y medio de dólares que no sabemos de dónde salieron, ¿Cuánto más va a ganar él con un libro con todo este amarillismo que está promocionando?”, se preguntó el opositor venezolano.
También lea Trump: "Solo me reuniría con Maduro para discutir una cosa, una salida pacífica del poder"¿Qué pasaría si Trump se reúne con Maduro?
Tanto Mora como Ackerman están convencidos de que es imposible que haya una reunión Trump-Maduro por las consecuencias legales que eso podría comportar. El gobierno estadounidense ha señalado a Maduro y a otros funcionarios venezolanos de alto rango como narcoterroristas. Además, hay una orden de detención por parte del Departamento de Justicia para encausarlo.
“Parece que al presidente se le olvidó ese detalle, pero sería una buena pregunta para un abogado, para saber el alcance legal que tendría si un presidente se reúne con alguien que está encausado por temas de narcoterrorismo”, indicó Mora.
Ackerman, por su lado, está “completamente seguro” de que un encuentro entre ambos no se podría materializar porque, de lo contrario, “Trump estaría rompiendo las leyes de este país”.
“Es como si ‘El Chapo’ (Guzmán) le pide una reunión a Trump para llegar a un acuerdo para ver si entrega la droga o qué”, manifestó el experto, al tiempo que recordó que el presidente en disputa “debe entenderse con la DEA (Administración de Control de Drogas de EE.UU.) o con el poder judicial estadounidense”.
La agenda de Trump sobre Venezuela
Mora, que actualmente ocupa el puesto de director del Centro de Estudios Latinoamericanos y del Caribe de la Universidad Internacional de Florida, sostiene que Trump “no está comprometido con una agenda de democracia y derechos humanos”, unas ideas que el mandatario ha repetido en numerosas ocasiones para referirse a la situación en Venezuela.
“Él es transparente y trata de manipular cínicamente los sentimientos de comunidades que tuvieron que salir de su país, como Cuba, Nicaragua o Venezuela, y para mí es obvio que está tratando de engañar a la comunidad por razones electorales”, insistió.
Ackerman subraya que “en el caso de Venezuela también está implicado el gobierno ruso, el chino, el cubano, (la organización terrorista) Hezbolá, las FARC, … es decir todos los que odian a Estados Unidos están metidos allá”.
Descarta “por completo” una guerra o intervención militar en Venezuela y asegura que las “sanciones están funcionando” para presionar al gobierno en disputa y limitar sus movimientos en todo el mundo.
“No hay un consenso, y sobre todo en los países fronterizos como Brasil y Colombia, para una intervención militar en Venezuela. Así que el presidente Trump no va a decidir mandar soldados americanos cuando no va a tener el respaldo de la región”, argumentó.
Mora pudo tener acceso al libro completo antes de su lanzamiento y, tras su lectura, constató que “la administración Trump no tenía estrategia” para hacer frente a la grave crisis política en Venezuela.
“Ellos pensaban que apretando con sanciones, y sanciones que pudieran afectar a las fuerzas armadas, acabarían dando un golpe de estado contra Maduro. Ese era el plan A, pero no había ni plan B ni C”, afirmó. Agregó convencido de que esas acciones eran “para demostrar a la comunidad venezolana que estaban haciendo algo, aunque no estuviera funcionando”.
Una opinión que contrasta con la de Ackerman, que lamenta que haya voces críticas sobre la actuación de la Casa Blanca para encontrar una vía de salida a la grave situación que se vive en Venezuela.
“Creo que la situación es demasiado compleja para que nosotros fácilmente digamos que no han hecho nada”, afirmó.