El gobierno en disputa de Venezuela denunció este martes la vandalización de la sede consular del país en Colombia y pidió al gobierno del presidente Iván Duque investigar los hechos y cumplir con los tratados internacionales.
El canciller Jorge Arreaza explicó que, según denuncias que le llegaron directamente desde la capital colombiana, la sede fue “destruída” y “desmantelada” este fin de semana.
En un video transmitido por Arreaza, se observan vidrios rotos, rejas incompletas y objetos en el suelo.
“El Estado colombiano viola la disposición, las normas de (…) la Convención de Viena sobre Relaciones Diplomáticas y Consulares de manera flagrante. Una vez más, se agrede a Venezuela por acción u omisión”, indicó el diplomático.
En un comunicado publicado por Arreaza más temprano, se hace responsable al Gobierno de Colombia por “la pérdida o violación de los bienes, archivos y documentos” en el consulado.
El canciller calificó como “irresponsabilidad" del Estado colombiano la “lamentable” situación. Explicó que el día lunes (27 de julio) la policía diplomática fue hasta la sede en cuestión para abrir una investigación.
El consulado venezolano en Bogotá estuvo inactivo desde febrero de 2019.
“Ojalá que la investigación dé con los responsables, por acción. Y que los responsables por omisión, es decir, el Estado colombiano, responda por sus obligaciones internacionales”, señaló Arreaza.
Por su parte, Tomás Guanipa, el embajador de Venezuela para Colombia designado por el gobierno interino liderado por Juan Guaidó, informó en su cuenta de Twitter que pidieron a la canciller colombiana, Claudia Blum, se inicie investigación penal que permita establecer las responsabilidades pertinentes.
Además, también pidieron mayor seguridad para otros inmuebles propiedad del Estado venezolano en Colombia.
Guanipa explica que desde que se rompieron relaciones diplomáticas, en febrero del año pasado, el personal diplomático y consular venezolano cerró las oficinas, “llevándose consigo parte de los archivos, bienes y llaves de acceso respectivas, dejando además enormes deudas”.
Apuntó que “llama la atención” que sea el gobierno en disputa “quienes incluso antes que las autoridades policiales, llegaron al sitio y realizaron fotos y videos, utilizados por el régimen para iniciar una campaña de distracción sobre los problemas que aquejan a los venezolanos”.
Hasta el momento, el gobierno colombiano no se ha pronunciado por los hechos.