Junto a la crisis política que sacude al país, también se culpa al Gobierno del deterioro económico nacional y de la creciente carestía que sufren los hogares venezolanos.
La deuda del gobierno venezolano creció más de seis por ciento el primer trimestre de este año y a fines de marzo se situaba en más de $122 mil millones de dólares.
La información difundida en Caracas por el diario El Universal, señala que de acuerdo con cifras del despacho de las finanzas públicas, a fines del 2013 la deuda era de poco más $115 mil millones de dólares.
El marcado declive de la economía venezolana fue resaltado por Vicente Brito, expresidente de Fedecámaras y presidente de la Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución.
El declaraciones a la publicación La Patilla, Brito dijo que ya casi al final del primer semestre de 2014, los indicadores económicos y sociales del país son “angustiantes”.
Brito precisó que “a pesar de los anuncios oficiales de reactivación económica y alianza para aumentar la producción con el sector privado, los avances no han ocurrido”, y también calificó de preocupante la paralización de las empresas públicas.
El reportaje señala que “aunque el precio del petróleo continúa por encima de los $90 dólares, los ingresos ordinarios se quedan cortos frente al tamaño del gasto, por lo cual la administración de Nicolás Maduro cubre parte de la brecha con el endeudamiento”.
Entre los peores índices, señalados como los más negativos registrados en el país en los últimos 50 años, están el desempleo de 10 por ciento (que en los jóvenes supera el 20 por ciento), y la carestía de la vida que se eleva al 37 por ciento, y en algunas zonas del interior al 40 por ciento.
También una inflación cercana al 70 por ciento y una caída en picada de la producción en sectores como la industria del acero, aluminio, cemento y la eléctrica.
El sector de los alimentos es identificado como el de mayores afectaciones “sin posibilidades de recuperación” por el bajo rendimiento de las empresas públicas.
El Gobierno tiene—señala—el 70% de las tierras para producir, el 55% de la agroindustria, 75% del sector pesca y 80% de los agroquímicos.
La información difundida en Caracas por el diario El Universal, señala que de acuerdo con cifras del despacho de las finanzas públicas, a fines del 2013 la deuda era de poco más $115 mil millones de dólares.
El marcado declive de la economía venezolana fue resaltado por Vicente Brito, expresidente de Fedecámaras y presidente de la Red por la defensa al Trabajo, la Propiedad y la Constitución.
El declaraciones a la publicación La Patilla, Brito dijo que ya casi al final del primer semestre de 2014, los indicadores económicos y sociales del país son “angustiantes”.
Brito precisó que “a pesar de los anuncios oficiales de reactivación económica y alianza para aumentar la producción con el sector privado, los avances no han ocurrido”, y también calificó de preocupante la paralización de las empresas públicas.
El reportaje señala que “aunque el precio del petróleo continúa por encima de los $90 dólares, los ingresos ordinarios se quedan cortos frente al tamaño del gasto, por lo cual la administración de Nicolás Maduro cubre parte de la brecha con el endeudamiento”.
Entre los peores índices, señalados como los más negativos registrados en el país en los últimos 50 años, están el desempleo de 10 por ciento (que en los jóvenes supera el 20 por ciento), y la carestía de la vida que se eleva al 37 por ciento, y en algunas zonas del interior al 40 por ciento.
También una inflación cercana al 70 por ciento y una caída en picada de la producción en sectores como la industria del acero, aluminio, cemento y la eléctrica.
El sector de los alimentos es identificado como el de mayores afectaciones “sin posibilidades de recuperación” por el bajo rendimiento de las empresas públicas.
El Gobierno tiene—señala—el 70% de las tierras para producir, el 55% de la agroindustria, 75% del sector pesca y 80% de los agroquímicos.