Guillermo Corchez, ex representante diplomático de Panamá ante la OEA, dice que hay países miembros de ese organismo que anteponen a la democracia sus nexos económicos con Caracas.
El recién destituido embajador panameño ante la OEA, Guillermo Cochez, dijo que muchos países latinoamericanos han abandonado los principios e ideales de esa organización al ser conscientes y aceptar lo que ocurre en Venezuela.
En declaraciones al diario El Nuevo Herald, el diplomático señaló que esos gobiernos “por todos los vínculos económicos que tienen (con Venezuela) anteponen sus intereses a todo lo que significa democracia”.
Cochez due destituido de su cargo por el presidente panameño Ricardo Martinelli después de que como embajador ante la OEA denunció el pasado miércoles que con la irregular sucesión de poderes en Venezuela, a falta de la juramentación como presidente de Hugo Chávez, se viola la Carta Democrática Interamericana.
Según el exembajador, que en esa oportunidad emplazó a la OEA a que hicera algo, hay una complicidad continental en lo que respecta a Venezuela que conspira contra la existencia del propio organismo regional.
“Seamos un poco más serios. A la OEA la estamos acabando porque se han olvidado de la razón de su existencia: la promoción y defensa de los derechos humanos y la promoción y defensa de la democracia”, dijo al Herald.
Tras la separación del embajador, el canciller panameño, Rómulo Roux, desmintió que Caracas hubiese presionado a su gobierno para que destituyera a Cochez. “Cero presiones, cero amenazas”, dijo.
En declaraciones al diario El Nuevo Herald, el diplomático señaló que esos gobiernos “por todos los vínculos económicos que tienen (con Venezuela) anteponen sus intereses a todo lo que significa democracia”.
Cochez due destituido de su cargo por el presidente panameño Ricardo Martinelli después de que como embajador ante la OEA denunció el pasado miércoles que con la irregular sucesión de poderes en Venezuela, a falta de la juramentación como presidente de Hugo Chávez, se viola la Carta Democrática Interamericana.
Según el exembajador, que en esa oportunidad emplazó a la OEA a que hicera algo, hay una complicidad continental en lo que respecta a Venezuela que conspira contra la existencia del propio organismo regional.
“Seamos un poco más serios. A la OEA la estamos acabando porque se han olvidado de la razón de su existencia: la promoción y defensa de los derechos humanos y la promoción y defensa de la democracia”, dijo al Herald.
Tras la separación del embajador, el canciller panameño, Rómulo Roux, desmintió que Caracas hubiese presionado a su gobierno para que destituyera a Cochez. “Cero presiones, cero amenazas”, dijo.