Las Naciones Unidas y sus Estados miembro deben ejercer mayor presión sobre el gobierno en disputa de Venezuela para que permita que las agencias internacionales apoyen las iniciativas para evitar la propagación de la COVID-19 en el país. Este es el pedido de Human Rights Watch, los Centros de Salud Pública y Derechos Humanos y de Salud Humanitaria de la Universidad Johns Hopkins y la organización Women’s Link Worldwide.
“El Secretario General debe instar en forma pública a las autoridades venezolanas a permitir una respuesta humanitaria apolítica y a gran escala de la ONU (…). Maduro debe dejar de victimizarse y permitir que los expertos de la ONU hagan su trabajo”, sostuvo Louis Charbonneau, director para la ONU de Human Rights Watch, de acuerdo al comunicado publicado por la organización este miércoles.
El texto argumenta que, incluso antes de la pandemia, el sistema de salud venezolano “ya había colapsado” y que la propagación de la COVID-19 “ha exacerbado la emergencia preexistente”.
“El precario sistema de salud venezolano, debilitado por años de abandono de la infraestructura, escasez de medicamentos e insumos y graves interrupciones del suministro de agua, no está en condiciones de prevenir la propagación del COVID-19”, aseguró, por su parte, la doctora Kathleen Page, médica y académica de la Facultad de Medicina de la Universidad John Hopkins, de acuerdo al comunicado.
También lea Llega a Venezuela avión con ayuda humanitaria de la ONUEs por ello que estas organizaciones indican que “las autoridades venezolanas no deberían interferir en la distribución equitativa de asistencia y deben permitir que la ONU haga todo lo que está a su alcance para ayudar a la población venezolana”.
Eso implicaría, según el comunicado, otorgar a los trabajadores humanitarios pleno acceso a todos los centros de salud, permitirles libre circulación y darles acceso prioritario al combustible.
Igualmente piden que se abra el acceso a los datos de la pandemia en el país, permitiendo que expertos independientes analicen y publiquen los datos epidemiológicos disponibles y difundan una contabilización precisa sobre los casos confirmados de coronavirus y las muertes por la enfermedad.
Esta preocupación será presentada este mismo miércoles en un evento especial de la ONU titulado: “Ayudar a Venezuela a enfrentar la emergencia humanitaria durante la pandemia de COVID-19”, organizado por las misiones permanentes de Alemania y la República Dominicana.
El gobierno interino del país anunció este fin de semana la transferencia para la Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Cruz Roja de unos 17 millones de dólares para la adquisición de equipos de protección para el personal sanitario del país.
Por su parte, el gobierno en disputa asegura que el retorno de venezolanos, específicamente de Colombia, ha afectado negativamente el número de contagios de coronavirus en el país.
Recientemente las autoridades venezolanas anunciaron la instalación del primer hospital de campaña en una importante plaza de conciertos en la capital del país, Caracas, con una capacidad instalada de 900 camas, según información oficial.