El presidente en disputa de Venezuela, Nicolás Maduro, descalificó la decisión del Departamento de Estado de EE. UU. de agregar a dos exfuncionarios a la lista de los “más buscados” y el ofrecimiento de recompensas para dar con información sobre estas personas.
El gobierno estadounidense ofreció sendas recompensas de 5 millones de dólares por Luis Motta Domínguez, exministro de Energía Eléctrica de la administración en disputa, y por Eustiquio Lugo Gómez, exviceministro de Finanzas.
Ambos habían sido blanco de sanciones desde Washington por corrupción, mientras estaban al frente de la estatal eléctrica Corpoelec. Tras el anuncio, el presidente en disputa, Nicolás Maduro, repudió las sanciones.
“Ellos están en guerra en contra de Venezuela, una guerra de carácter criminal, inmoral, pero sin lugar a dudas han puesto a sufrir a nuestro pueblo”, indicó el mandatario en disputa.
La cancillería también emitió un comunicado en el que rechaza la política estadounidense de “desatar persecuciones judiciales contra funcionarios o exfuncionarios del gobierno bolivariano a partir de la injuria”.
Asegura que con ello buscan “perjudicar la imagen de las instituciones del Estado” y así justificar “nuevos ataques”.
También lea EE.UU. ofrece recompensa por exfuncionarios venezolanosPara el dirigente opositor Carlos Salazar, las nuevas medidas demuestran que la comunidad internacional no pierde de vista todos los presuntos crímenes que se están registrando por parte de funcionarios vinculados a Nicolás Maduro.
“Nosotros lo que queremos es que este gobierno cese en sus funciones, este gobierno ya está agobiado por la incapacidad que han tenido sus funcionarios, acabaron con PDVSA, con la electricidad, con todos los servicios”, apuntó Salazar.
Para el analista político Carlos Luna, las sanciones impuestas no sólo responden a mecanismos de presión de Estados Unidos, sino a los reclamos de la mayoría de gobiernos democráticos de la región.
“Es un elemento disuasivo para generar una transformación de lo que pueda ser una conducta del gobierno venezolano que permita una transición política adecuada a lo que tiene que ver con la democracia”, explicó el experto.
Hasta este jueves un total de 91 funcionarios venezolanos han sido sancionados por los diferentes organismos de la justicia norteamericana. Una de las alertas más importante recae sobre el propio presidente en disputa, Nicolás Maduro, por quien también se ofrece una millonaria recompensa.