Una nueva tormenta invernal recorre al país de costa a costa con temperaturas extremadamente frías. En Illinois, un ciclón bomba ya deja cortes de electricidad y pronostican vientos sostenidos de casi 100 kilómetros por hora, lo que amenaza además a población vulnerable como migrantes que duermen en carpas. Ya se registran más de 1.600 vuelos cancelados, de acuerdo con FlightAware. En partes del oeste de Nueva York se desplegó la Guardia Nacional para ayudar con operaciones de emergencia y los equipos de rescate ya están listos, dijo la gobernadora Kathy Hochul.
“Estamos proyectando que en este momento volverán a caer fuertes lluvias a través del valle de Hudson y es muy preocupante por los vientos e inundaciones costeras adicionales a lo largo de la ya golpeada costa de Long Island”, dijo Kathy Hochul, Gobernadora de Nueva York.
Varios estados todavía no se recuperan de las inundaciones de la tormenta pasada, como en Connecticut donde tuvieron que rescatar a trabajadores en una pizzería; en Maine, donde el agua arrastró casas en las zonas costeras y en Nueva Jersey, Carolina del Norte y Georgia, donde varias localidades siguen bajo el agua. En Iowa, la nieve y bajas temperaturas amenazan el caucus republicano de este lunes. Autoridades limitaron el tránsito de camiones pesados en carreteras interestatales, hicieron advertencias para evitar casos de hipotermia y pidieron a los trabajadores tomar medidas ante el frío y la lluvia.
“Yo tenía mis guantes y me fui a cargar ahí y se me perdieron pero está fuerte el frío, tiene que pararse uno a veces.// El viento estaba muy fuerte y no me dejaba dar pedal y me tumbó de la bicicleta y a otro compañero también”, comentó Carlos Enciso, Repartidor de comidas.
Expertos prevén que lo peor de esta tormenta ocurra entre la noche del viernes y el sábado, según el Servicio Nacional de Meteorología que emitió varias alertas ante el mal clima.