En Fotos I Vuelos secretos de vigilancia monitorean actividad rusa en frontera oriental
Un miembro de la tripulación toma una fotografía de recuerdo desde la cabina de un avión militar francés de vigilancia del Sistema de Control y Alerta Aerotransportado (AWACS) mientras realiza una misión de reconocimiento de 10 horas desde el centro de Francia hasta el espacio aéreo rumano y de regreso.
El avión militar (AWACS) tiene una tripulación de 26 militares y puede volar hasta 12 horas sin reabastecerse a una altitud de 10 kilómetros. Con un potente radar que gira seis veces por minuto en el fuselaje y una gran cantidad de equipo de vigilancia, el avión puede detectar lanzamientos de misiles, bombardeos aéreos y otras actividades militares del conflicto.
Desde la parte trasera del avión, los técnicos militares monitorean los datos en sus pantallas.
El comandante del escuadrón AWACS de Francia describió los vuelos regulares de vigilancia, junto con patrullas de cazas, radares terrestres, baterías de misiles y otros equipos a disposición de la OTAN, como "un escudo" contra cualquier posible desbordamiento.
El oficial al mando habla con los miembros de la tripulación a bordo del avión. Los AWACS también sirven como advertencia a Rusia de que la OTAN está siguiendo de cerca la guerra en sus fronteras.
Mientras el avión merodeaba y escaneaba, la tripulación detectó un distante AWACS ruso sobre el mar de Azov, a muchos cientos de kilómetros de distancia, en el lado oriental de la península de Crimea.