El Consejo Permanente de la OEA aprobó por consenso una declaración conciliadora sobre Venezuela como alternativa al proceso de aplicación de la Carta Democrática.
La declaración aprobada el miércoles reafirma “su fraternal ofrecimiento a la hermana República Bolivariana de Venezuela de identificar, de común acuerdo, algún curso de acción que coayude a la búsqueda de soluciones a su situación mediante un diálogo abierto e incluyente entre el Gobierno… y todos los actores políticos y sociales de esa nación”.
El secretario general de la organización, Luis Almagro, no asistió a la reunión que se extendió por más de 10 horas, para dejar claro que esta iniciativa es diferente de la suya.
De todas maneras, Almagro recibió el apoyo del embajador de Estados Unidos ante la OEA, Michael Fitzpatrick, quien durante el debate del miércoles coincidió en que el Tribunal Supremo de Venezuela ha bloqueado casi cada medida aprobada por el parlamento venezolano liderado por la oposición.
"Apoyamos firmemente los mecanismos constitucionales que permitan la separación de poderes y al pueblo venezolano expresar su voluntad de manera pacífica y democrática", dijo el embajador Fitzpatrick.
Varias delegaciones, además de la de Estados Unidos consideraron que la declaración aprobada es “blanda” y se queda corta ante la grave crisis por la que atraviesa Venezuela.
La delegación de Paraguay, por ejemplo, dijo no poder apoyar el texto porque la resolución no incluye una “exhortación” al Gobierno de Venezuela para que permita la convocatoria del referendo revocatorio que promueve la oposición de ese país.
La delegación de Venezuela fue apoyada solo por Bolivia, Nicaragua, Ecuador y Dominica –una muestra de la pérdida de influencia en el Hemisferio que antes tenía por segura.
Mientras se desarrollaba el debate, el secretario general Luis Almagro recibió en su despacho al dirigente opositor venezolano Carlos Vecchio, quien dijo a la agencia Associated Press que fue portador de un acuerdo adoptado la víspera por la Asamblea Nacional a favor de invocar la Carta Democrática Interamericana.
En Caracas, en un mitin con jóvenes oficialistas, el presidente Nicolás Maduro afirmó que "Venezuela no será dominada de ningún imperio, ni por la OEA, ni por la basura que es el secretario Almagro".
El mandatario instó a sus seguidores a "iniciar una resistencia histórica" contra el imperialismo y convocó a una protesta el sábado contra la decisión de la OEA.