El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, instó el viernes a los aliados occidentales a acelerar su apoyo militar a Ucrania, y advirtió en una importante conferencia de seguridad internacional que los retrasos jugarían a favor de Rusia a medida que la invasión se acerca a su primer aniversario.
“No hay alternativa a la velocidad, porque es la velocidad de la que depende la vida”, dijo Zelenskyy en la Conferencia de Seguridad de Munich en Alemania.
Ucrania depende de las armas occidentales para frustrar la ambición del presidente ruso Vladimir Putin de asegurar el control de grandes áreas del país, en lo que se ha convertido en una prueba de la determinación de los gobiernos extranjeros en medio de los crecientes costos financieros.
Cerca de 40 jefes de estado y de gobierno, así como políticos y expertos en seguridad de casi 100 países, incluidos Estados Unidos, Europa y China, asistirán a la reunión de tres días.
El presidente de Ucrania, Volodymyr Zelenskyy, asiste a una conferencia de prensa conjunta con el primer ministro sueco, Ulf Kristersson, en Kiev, Ucrania, el 15 de febrero de 2023.
En su pedido de más armas occidentales, Zelenskyy comparó la lucha de Ucrania contra la invasión rusa con la pelea bíblica entre David y Goliat, y dijo que su país tenía el coraje de David pero necesitaba ayuda para conseguir la honda.
Zelenskyy prometió que su país finalmente prevalecería sobre la agresión de Moscú, pero advirtió que Rusia “todavía puede destruir muchas vidas”.
“Es por eso que debemos darnos prisa”, dijo Zelenskyy. “Necesitamos la velocidad”.
Zelenskyy retrata a Ucrania como defensora de los valores occidentales de libertad y democracia contra la tiranía y argumenta que su país debe estar adecuadamente abastecido para defenderse de la fuerza mucho mayor de Rusia. Los países occidentales se han puesto del lado de él, pero a veces han tardado en cumplir con sus solicitudes.
El canciller alemán Olaf Scholz, quien ha sido uno de los principales patrocinadores de Ucrania, aunque a veces vacilante, renovó las promesas de ayudar, pero también insistió en que los aliados de Kiev no deben apresurarse.
“A pesar de toda la presión para actuar que sin duda hay, en esta cuestión decisiva, el cuidado debe venir antes que las prisas, la cohesión antes que las actuaciones en solitario”, dijo Scholz, cuya prudencia sobre Ucrania ha sido notable.
Berlín acordó el mes pasado entregar tanques de batalla Leopard de fabricación alemana a Ucrania y otorgar a otros licencias para hacer lo mismo. Los funcionarios alemanes, que enfrentaron una fuerte presión para dar ese paso, han indicado desde entonces que están decepcionados de que otros países no hayan presentado más.
También lea Resolución de la ONU pide fin de la invasión rusa en UcraniaLa necesidad de proporcionar a Ucrania miles de millones de dólares en ayuda militar ha ejercido presión sobre los países aliados. Kiev, después de recibir promesas occidentales de tanques y más municiones, ahora espera aviones de combate, pero algunos países se han negado a enviarlos.
El presidente francés, Emmanuel Macron, respaldó el llamamiento de Zelenskyy.
“Debemos ser creíbles colectivamente”, dijo Macron en la reunión, “porque es la única forma de hacer que Rusia regrese a la mesa de negociaciones de manera aceptable y construya una paz sostenible. Es decir: en el momento y en las condiciones que elijan los ucranianos”.
Por primera vez en dos décadas, los organizadores de la conferencia no invitaron a funcionarios rusos a Munich. Fue el último desaire de los países occidentales que buscan aislar diplomáticamente a Rusia por la invasión de Ucrania que comenzó el 24 de febrero de 2022.
El ministro de Defensa alemán, Boris Pistorius, dijo que la guerra de Rusia en Ucrania eclipsaría los procedimientos. Funcionarios y analistas occidentales dicen que el conflicto se acerca a una fase crítica al entrar en su segundo año la próxima semana.
La guerra “no es simplemente un conflicto europeo”, sino que tiene implicaciones mucho más allá del continente, dijo Pistorius. Las economías de todo el mundo se han tambaleado por el impacto de la guerra en el suministro de cereales, los precios de la energía y la inflación.
La vicepresidenta de EE. UU., Kamala Harris, se unirá a los líderes de Francia, Alemania y el Reino Unido en la conferencia de Munich.
En la misma conferencia del año pasado, celebrada pocos días antes de que el presidente ruso, Vladimir Putin, enviara tropas a Ucrania, Harris compartió las advertencias de Estados Unidos de que Rusia estaba a punto de atacar a su vecino y dijo: “Desde el final de la Guerra Fría, este foro no se había reunido bajo tal circunstancias terribles.”
En un discurso programado para el sábado, el vicepresidente expondrá lo que está en juego en la guerra y por qué es importante, para reforzar el caso de mantener el apoyo de Estados Unidos a Ucrania durante el tiempo que sea necesario, dijo la Casa Blanca.
Frans Timmermans, vicepresidente ejecutivo de la comisión ejecutiva de la Unión Europea, dijo que la UE de 27 naciones hasta ahora ha mantenido la unidad sobre el tema.
Timmermans también expresó su esperanza de que China pueda ejercer presión sobre Rusia para poner fin a la guerra.
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