Para Londres, para los competidores, para los 300.000 visitantes que se esperan, ya ha comenzado la cuenta regresiva.
Los pubs británicos son mundialmente famosos y son un punto obligado de visita para los turistas.
Los temores de una potencial crisis nuclear reflotan temores de las bombas atómicas de Hiroshima y Nagasaki.
Un británico compareció ante un tribunal en Londres, acusado por EE.UU. de conspirar para vender partes de misiles a Irán.