El comisionado presidencial para Salud y Atención Sanitaria del gobierno interino de Venezuela, José Manuel Olivares, cuestionó la llegada de 212 médicos cubanos para hacer frente a la pandemia de COVID-19 e insistió en que el país cuenta con personal de salud capacitado para la tarea, pero no con recursos.
“Sí hay plata para un nuevo negocio para los cubanos, pero no hay dinero para comprar material de protección a nuestros médicos que hoy se están muriendo”, dijo Olivares.
Afirmó que “hay una profunda indignación” y dijo hablar “en nombre de todo el personal de salud”.
“No es médicos lo que falta en Venezuela, es material de protección, es terapias intensivas, es políticas claras, es hospitales donde no se diga no hay sino donde se salve la vida de los venezolanos”, dijo Olivares.
El delegado interino cuestionó “cuánto le cuesta a la república y cuánto está pagando la dictadura a la otra dictadura cubana por estos funcionarios” y aclaró que el problema no es la nacionalidad sino “quién verifica sus credenciales”.
“¿Cómo usted pone la vida de su hijo, de su padre, en una persona que no sabe quién es, que no sabe si es médico o no es médico, que no sabe si es un oficial de inteligencia, un militar cubano disfrazado en nuestros hospitales?”, preguntó Olivares, quien es médico también.
De la parte oficialista, el ministro de Salud del gobierno en disputa, Carlos Alvarado, adelantó que en las próximas semanas recibirán a otros grupos de médicos cubanos.
“Ustedes se van a incorporar a la lucha contra el COVID en esta primera fase en Caracas, la semana próxima llegaremos a 500 colaboradores y luego en septiembre a 1.000 colaboradores. Son 1.000 colaboradores que se incorporan en este convenio de hermanos, Cuba y Venezuela”, dijo el funcionario.
El fallecido expresidente Hugo Chávez promovió un programa social denominado “Barrio Adentro” que, en principio, bajo un esquema de acuerdos de cooperación, trajo a Venezuela a decenas de médicos cubanos para que brindaran atención sanitaria en zonas de bajos recursos.