El director para Europa de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el doctor Hans Kluge, está alentando a las naciones europeas a reforzar los controles mientras el continente lucha por contener lo que parece ser una segunda ola de la pandemia del nuevo coronavirus.
En una conferencia de prensa virtual desde la sede de la institución en Copenhague, Kluge dijo que las estadísticas muestran que Europa está atravesando un repunte temprano del invierno y la primavera. Las nuevas infecciones están alcanzando los 100.000 casos por día, con casi 700.000 registrados esta semana, la cifra más alta desde que empezó la pandemia. La región ha tenido un promedio de 1.000 muertes diarias, haciendo al virus la quinta causa de muertes en el continente.
Pero Kluge dijo que no todas las noticias son malas. Señaló que mientras hay entre dos o tres veces más casos reportados ahora que durante el repunte inicial en abril, las muertes son cinco veces menos que en ese momento. Explicó que ahora son personas más jóvenes y menos vulnerables las que están siendo contagiadas.
Sin embargo, mientras el clima continúa refrescándose en Europa, advirtió que hay un potencial para que el virus avance entre distintas generaciones en la medida que las personas tienden a reunirse más en lugares bajo techo.
Pero el alto cargo de la OMS dijo que “un simple, rápido ajuste de las medidas de protección en este momento, como reforzar el uso de máscaras y controlar las aglomeraciones en lugares públicos o privados, podría salvar hasta 281.000 vidas de aquí a febrero en 53 países”.
Advirtió que lo contrario también es cierto, un prolongado relajamiento de las restricciones podría aumentar las tasas de mortalidad de cuatro a cinco veces lo que fueron en abril.
Los comentarios del director de la OMS para Europa se producen en momentos en que Inglaterra, Francia, Alemania y otras naciones han anunciado nuevas medidas de prevención para tratar de controlar el avance del virus.
