La Organización Mundial de la Salud (OMS) lamenta que las naciones ricas han comprado la mayor parte del suministro disponible de vacunas contra el COVID-19, imposibilitando así que las obtengan también los países más pobres.
En la rueda de prensa regular de la agencia en Ginebra, el director general Tedros Adhanom Ghebreyesus recordó que la OMS organizó una cooperativa internacional de vacunas, COVAX, la cual ya tiene contratos para 2.000 millones de dosis, que empezarán a ser distribuidas entre los países de ingresos medios y bajos tan pronto como estén disponibles.
Tedros dijo que la cooperativa de vacunas tiene una posición preferencial para obtener 1.000 millones de vacunas adicionales. Pero 42 países, 36 naciones ricas y seis naciones de ingresos medios, ya están ejecutando programas de vacunación, lo que deja sin vacunas disponibles a los países en vías de desarrollo.
Ahondando en el problema, Tedros sostuvo que los países de ingresos medios y altos, que son parte del programa COVAX, están alcanzando acuerdos adicionales para bilateralmente obtener más vacunas. “Esto potencialmente hará que el precio suba para todo el mundo y significa que personas de alto riesgo en países más pobres y marginalizados no recibirán la vacuna”, afirmó.
El jefe de la OMS dijo que el acaparamiento de vacunas por parte de los países ricos, a lo que se refirió como “nacionalismo de vacunas”, es contraproducente y afecta al mundo entero. Por otra parte, Tedros dijo que compartir equitativamente las vacunas salva vidas, estabiliza los servicios de salud pública y ayuda a que la economía mundial se recupere más rápidamente.
Tedros enfatizó, además, que vacunar de forma equitativa ayuda a reducir la transmisión, lo cual también limita las oportunidades del virus para mutar.
El director general instó a los fabricantes a priorizar el suministro de vacunas y a entregarlas a través de la iniciativa COVAX, y urgió a los países que tienen contratadas más vacunas de las que necesitarán a donar algunas.
“Recuerden que terminar con la pandemia del coronavirus es una de las más grandes carreras de la humanidad y, nos guste o no, esta carrera la ganaremos o perderemos juntos”, zanjó.