El presidente Joe Biden concedió este jueves la Medalla Presidencial de la Libertad, el mayor galardón civil en Estados Unidos, a 17 destacadas personas, entre ellas dos hispanas.
Los hispanos galardonados fueron Julieta García, la primera mujer estadounidense de ascendencia mexicana que presidió una universidad en Estados Unidos, y Raúl Yzaguirre, un activista por los derechos humanos.
La medalla premia a quienes “han hecho contribuciones meritorias especiales a la seguridad o los intereses de Estados Unidos, a la paz mundial, a la cultura o a otras iniciativas significativas del sector público y privado”.
Entre los homenajeados estuvieron también la gimnasta Simone Biles, la futbolista Megan Rapinoe, la excongresista y sobreviviente de la violencia con armas de fuego Gabby Giffords, y el fallecido senador John McCain.
Julieta García dijo a la Voz de América que para ella fue toda una sorpresa que fuera “el propio presidente de Estados Unidos los honrara por el trabajo que habíamos hecho”.
García, quien fue rectora de la Universidad de Texas en Brownsville, aseguró que “es un orgullo muy grande y un privilegio ser nombrada a este honor y representar a todas las latinas en Estados Unidos”.
Sin embargo, dijo que aún “hay mucho trabajo que todavía necesita hacerse”, si bien cree que el reconocimiento “da un poco de ánimo al ver a alguien que ya ha conseguido y honrado del trabajo”.
La gimnasta Biles es la persona más joven que ha recibido la Medalla Presidencial de la Libertad, con 25 años. En su haber cuenta con 32 medallas olímpicas y de campeonatos mundiales y se ha convertido en una voz para el bienestar y la salud mental de las atletas.
Biden dijo que “cuando ella está en el podio, vemos lo que es: coraje absoluto para convertir las ganancias personales en un propósito mayor: salir a hablar por quienes no pueden hablar por sí mismos”.
En el caso de McCain, Biden dijo que fue él “quien lo alentó para que se postulara al Senado” al comienzo de su carrera política.
Otros dos fallecidos integraron los recipientes: Richard Trumka, expresidente del sindicato AFL-CIO, la mayor central obrera de EEUU; y Steve Jobs, fundador de Apple.
El resto de los galardonados fueron el actor Denzel Washington, la hermana Simone Campbell, el sacerdote Alexander Karloutsos, Khizr Khan, la enfermera Sandra Lindsay, los activistas de derechos civiles Diane Nash y Fred Gray, el ex senador Alan Simpson y la general Wilma Vaught.
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