Al menos 48 menores de edad sin acompañantes adultos llegaron en días recientes a Nueva York, enviados en avión por el gobierno federal, en busca de asilo.

“La ciudad tiene que hacerse cargo de esto porque tiene que haber recursos para que estos menores de edad tengan todo tipo de cuidado y protección por sobre todas las cosas”, nos dice Fabián Arias, un sacerdote argentino que funge de párroco en la iglesia San Pedro en Manhattan.

Arias se ha encargado de ayudar a menores que llegan sin sus padres pidiendo su custodia legal y hace un llamado a no juzgar a los padres que los envían solos.

“Son niños que huyen de la violencia, son niños que huyen del miedo y de la muerte y en esto le pido a la comunidad todo el amor y la comprensión posible.”

Pero para una madre colombiana que acaba de llegar desde la frontera con su hijo, es inconcebible enviar a un menor solo luego de los peligros que ella pasó.

Los menores arribaron justo después de la emergencia migratoria declarada por el alcalde de la ciudad que debería ampliar los fondos y ayudas para responder a la crisis humanitaria. Ángela González, Voz de América, Nueva York.