La medida de esperar a intervenir cuando una persona fuera violenta, posara peligro para sí misma o los demás a consecuencia de problemas mentales cambió en la ciudad de Nueva York. Las nuevas directrices se enfocan en la prevención e incluyen transportar a las personas con signos de problemas mentales a un hospital aun en contra de su voluntad.
Y aunque al menos 6 organizaciones como Legal Aid Society apoyan la necesidad de proveer ayuda, no están de acuerdo con que la policía esté a cargo de lidiar con el problema.
La crisis de salud mental se ha hecho evidente en las calles de Nueva York y multitudes han sido testigos de individuos con señales de problemas mentales, dando gritos, haciéndose daño o atacando a otros, en especial en las estaciones del transporte público, según reportes policiales.
El alcalde también dijo que mejorarán los entrenamientos a la policía, a los trabajadores comunitarios y al personal hospitalario. El plan se implementó de manera inmediata. Ángela González, Voz de América, Nueva York.