Atrás quedó el mantra "todas las opciones están sobre la mesa", pronunciado por el expresidente Donald Trump y miembros de su gabinete. Hoy, buena parte de la política exterior de la Casa Blanca se concentra en las negociaciones entre gobierno y oposición de Venezuela, que se desarrollan en México.

"Si lo comparamos directamente con la administración de Trump, tenemos una aproximación más pragmática de la dinámica latinoamericana. Eso les ha permitido - por un lado-ganar tiempo, y por otro lado, observar la evolución venezolana y a partir de ahí, pues tomar decisiones al respecto", sostiene la historiadora y profesora universitaria Esther Mobilia.

"La política internacional de Biden ha sido espontánea, torpe e irresponsable con Venezuela", en opinión de la politóloga María Verónica Torres."Estamos viendo que el acercamiento es directamente con Maduro, y no ha través de un grupo de contacto mixto, y es entendible ¿por qué es entendible? Porque la oposición fue negligente en la administración de fondos de la ayuda humanitaria y porque han sido negligentes en el acompañamiento político de esta situación", expresa la politóloga María Verónica Torres.

La Casa Blanca acompañó la decisión de la oposición venezolana de sustituir la figura gobierno interino por una comisión parlamentaria... Incluso, una delegación opositora se reunió a comienzos de año, en Washington, con el subsecretario para asuntos del hemisferio occidental, Brian Nichols, quien les ratificó su apoyo a la lucha por elecciones libres para 2024.

Maduro critica el espaldarazo de Estados Unidos a sus detractores, pero aún así, ha mostrado, en varias oportunidades, su disposición a restablecer las relaciones bilaterales, rotas en 2019.

"Venezuela está preparada, totalmente preparada, para ir hacia un proceso de normalización y de regularización de relaciones diplomáticas, consulares y políticas, con este gobierno de Estados Unidos", dijo Maduro en entrevista con el periodista Ignacio Ramonet, exdirector de Le Monde Diplomatique.

El año pasado, enviados de la Casa Blanca viajaron a Caracas, en dos oportunidades, para encontrarse con miembros del gobierno venezolano a fin de promover la liberación de estadounidenses presos en Venezuela. Y aunque las conversaciones tuvieron su efecto con el intercambio de 7 prisioneros americanos por los sobrinos de la pareja presidencial, la vuelta a la diplomacia tomará tiempo.

"Nosotros tendríamos que ver cambios profundos y un progreso hacia elecciones libres y transparentes. Yo lo veo muy lejos de la realidad en este momento, pero la prioridad para nosotros es apoyar un proceso democrático dentro de Venezuela", aclaró el subsecretario de Estado para los asuntos del hemisferio occidental Brian Nichols, en conversación con VOA.

Biden mantiene las sanciones que comenzaron en la era de Barck Obama. Las ha utilizado para intentar que el chavismo ofrezca garantías para la participación política de la disidencia.

Y en ese intento de dar incentivos a Maduro para lograr elecciones libres, la Casa Blanca ha tomado decisiones como la eliminación de las sanciones contra el extesorero de la nación, Carlos Malpica o la aprobación de la licencia que le permite a la empresa Chevron operar en Venezuela. Pero, ¿en 2023 se puede esperar un mayor alivio de esas sanciones?

"Todo va a depender de la voluntad de sentarse a negociar y del clima que exista en el momento determinado y, por otro lado, si lo vemos de un contexto más amplio, de cómo va avanzando la guerra en Rusia, porque esto, de una u otra forma, ha sido un factor importante en la reconfiguración de las relaciones entre Venezuela y Estados Unidos en la actualidad", apunta la profesora Mobilia.

"El chavismo y Nicolás Maduro han sido lo suficientemente ágiles para construir vehículos económicos que evadan las sanciones, y eso les ha permitido mantenerse en el poder. ¿Qué yo vea que las sanciones puedan quedarse o puedan ser un medio de juego? Las sanciones no cumplieron su función, porque simplemente, la oposición no cumplió su función. Si la presión política hubiese seguido, las sanciones hubieran tenido una repercusión importante", afirma Torres.

La política migratoria hacia los venezolanos también ha estado en el radar de la administración Biden. Como primera medida, la aprobación y posterior extensión del Estatus de Protección Temporal o TPS para venezolanos, vigente hasta marzo de 2024. Y recientemente, el parole humanitario que le ofrece una vía para entrar legalmente a Estados Unidos los venezolanos que tengan un patrocinador y cumplan ciertos requisitos.