El sábado 7 de octubre, militantes de Hamás atacaron de forma sorpresiva a Israel, con un saldo de unas 500 personas muertas. Se considera el día de violencia más mortífero en Israel en 50 años.
El sábado 7 de octubre, militantes de Hamás atacaron de forma sorpresiva a Israel, con un saldo de unas 500 personas muertas. Se considera el día de violencia más mortífero en Israel en 50 años.