La agencia de obras públicas y socorro para refugiados palestinos de la ONU tiene una de las operaciones más grandes en Palestina, con 13 mil trabajadores en la Franja de Gaza, entre médicos, enfermeras, profesores, ingenieros y trabajadores sanitarios. La ONU reporta que todos ellos temen por sus vidas y de las poblaciones que intentan proteger.
“Estoy en contacto con nuestros colegas sobre el terreno todos los días, a veces más de una vez al día. Nos cuentan lo aterrorizados que están. Algunos han buscado refugio en edificios y escuelas de la ONU. Muchos han perdido a seres queridos, familiares y vecinos”, reveló Juliette Touma, Directora de Comunicaciones de la agencia de obras públicas y socorro de refugiados palestinos de la ONU.
Según el vocero del Secretario General, 11 de sus empleados han muerto, mil residencias han sido destruidas y unas 220 mil personas se encuentran refugiadas en 92 instalaciones de la ONU, mientras se agotan los suministros vitales.
“No hemos podido recibir suministros humanitarios desde el 7 de octubre. No podemos ingresar al personal de la ONU y no podemos sacar a ninguna persona que trabaje con nosotros”, continuó Touma.
El Secretario General de la ONU pidió la liberación de los rehenes en Gaza y mostró preocupación por enfrentamientos en la frontera libanesa.
“Me preocupa el reciente intercambio de disparos a lo largo de la Línea Azul y los recientes ataques denunciados desde el sur del Líbano. Hago un llamamiento a todas las partes y a aquellos que tienen influencia sobre ellas para que eviten una mayor escalada y efectos colaterales. Pido la liberación inmediata de todos los rehenes israelíes retenidos en Gaza. Los civiles deben estar protegidos en todo momento”, dijo António Guterres, Secretario General de la ONU.
El Secretario General ha sostenido varias reuniones con líderes de la región incluido el Ministro de relaciones exteriores de Egipto para poder abrir el paso de Rafah, que se reporta también ha sido bombardeado, en la frontera de Gaza con Egipto para crear un paso de ayuda humanitaria. Ángela González, Voz de América, Naciones Unidas, Nueva York.
