El gobierno de Panamá repatriará a migrantes de China, Ecuador y la India que sean detenidos intentando cruzar la peligrosa selva del Darién, que separa Centroamérica de Sudamérica, como parte de un programa más amplio financiado por Estados Unidos que busca frenar el flujo migratorio hacia el norte.
Esta semana, una treintena de colombianos fueron deportados en el primer vuelo de retorno financiado por Washington. El programa fue anunciado por el presidente panameño, José Raúl Mulino, a principios de julio cuando asumió el cargo prometiendo tomar medidas enérgicas contra la migración.
"El calendario de los próximos vuelos: del 24 al 30 (de septiembre) habrá a Colombia, el 29 habrá a Ecuador, el viernes 30, a Colombia y el 3 de septiembre a la India", dijo Mulino en conferencia de prensa.
El mandatario agregó que también "hay en camino unos chinos para la China" sin dar fecha, tras afirmar que "la logística tanto para la India como allá es un poquito distinto que para ir a Colombia".
Las medidas del nuevo gobierno panameño -como bloquear algunos pasos con alambres de púas- han empezado a surtir efecto y, solo en julio, los cruces irregulares de migrantes a través del Darién cayeron un 34 % desde el mes anterior.
Panamá se ha convertido en una ruta de paso para decenas de miles de migrantes, que en su mayoría buscan llegar a Estados Unidos. El año pasado, un récord de más de 520.000 migrantes -la mayoría de ellos venezolanos- cruzaron la peligrosa selva del Darién en busca de mejores oportunidades en el norte.
¡Conéctate con la Voz de América! Suscríbete a nuestros canales de YouTube, WhatsApp y al newsletter. Activa las notificaciones y síguenos en Facebook, X e Instagram.
Foro