El fiscal argentino Gerardo Pollicita pidió imputar a la presidenta argentina, Cristina Fernández, y a otros funcionarios de gobierno por el supuesto encubrimiento de iraníes tras el atentado a una mutual judía en Buenos Aires en 1994.
Pollicita, quien sigue adelante la investigación que originalmente llevó a cabo el fallecido fiscal argentino Alberto Nisman, llegó a la conclusión de acusar a Fernández y al canciller argentino, Héctor Timerman, tras analizar el informe de 300 hojas de Nisman.
La investigación de Nisman, quien murió en sospechosas circunstancias a solo horas de darla a conocer públicamente frente al Congreso, acusa a Fernández y Tiimerman y otros funcionarios de gobierno de encubrir a un grupo de iraníes que habrían llevado acabo el atentado que dejó 85 muertos y 300 heridos, y desviar la investigación.
La acusación de Nisman establece “la existencia de un plan delictivo destinado a dotar de impunidad a los imputados de nacionalidad iraní acusados en dicha causa [AMIA], para que eludan la investigación y se sustraigan de la acción de la justicia argentina”.
Con la imputación, Fernández podría ser llamada a dar una declaración indagatoria, presencial o por escrito si el juez que lleva la causa, Daniel Rafecas, lo establece.