El gobierno dio a conocer que los homicidios relacionados con armas de fuego en Estados Unidos bajaron 39 por ciento desde mediados del decenio de 1990, de 18 mil 253, en 1993, a 11 mil 101, en 2011.
El estudio agrega que en 2011, aproximadamente el 70 por ciento de los homicidios fueron cometidos con armas de fuego, principalmente con pistolas de mano.
El informe de la Oficina de Estadísticas de Justicia también descubrió que los crímenes no fatales con armas de fuego declinaron 69 por ciento desde mediados de la década de 1990, de un millón 500 mil en 1993 a 467 mil 300 en 2011.
La tendencia en homicidios relacionados con armas de fuego forma parte de una amplia declinación de crímenes violentos en todo el país, que cayó 65 por ciento en ese periodo, de 16 millones 800 mil a cinco millones 800 mil en 2011.
Según el estudio del Departamento de Justicia, las armas de fuego siguen siendo el arma más común en los asesinatos en Estados Unidos.
Otra encuesta divulgada también este martes pasado por el centro de estudios Pew la posesión de armas, en cambio, ha crecido en los últimos años, hasta llegar a un arma por habitante estadounidense en 2009, alrededor del doble que en 1968.
El estudio agrega que en 2011, aproximadamente el 70 por ciento de los homicidios fueron cometidos con armas de fuego, principalmente con pistolas de mano.
El informe de la Oficina de Estadísticas de Justicia también descubrió que los crímenes no fatales con armas de fuego declinaron 69 por ciento desde mediados de la década de 1990, de un millón 500 mil en 1993 a 467 mil 300 en 2011.
La tendencia en homicidios relacionados con armas de fuego forma parte de una amplia declinación de crímenes violentos en todo el país, que cayó 65 por ciento en ese periodo, de 16 millones 800 mil a cinco millones 800 mil en 2011.
Según el estudio del Departamento de Justicia, las armas de fuego siguen siendo el arma más común en los asesinatos en Estados Unidos.
Otra encuesta divulgada también este martes pasado por el centro de estudios Pew la posesión de armas, en cambio, ha crecido en los últimos años, hasta llegar a un arma por habitante estadounidense en 2009, alrededor del doble que en 1968.
