Los trágicos incendios de Los Ángeles siguen arrasando las viviendas de cientos de miles de personas, mientras las autoridades traen perros para buscar cadáveres, dado que no tienen aún una cifra exacta de muertos.

Entre ellos está Victor Shaw, de 66 años. Su familia dijo que murió en un heroico intento de defender su casa de toda la vida en Altadena, a pesar de tener problemas de movilidad.

Shari Shaw, Hermana de la victima, cuenta:

“No puedo imaginarme lo que podría haber estado pensando. Cómo podría haber estado tan asustado y yo no pude estar aquí... No pude estar aquí para salvarlo. No pude estar aquí... Eso es lo que más duele”.

Más tarde, encontraron su cuerpo afuera, con una manguera de jardín todavía en su mano. La lista de víctimas aumenta.

Entre tanto, bomberos de otros estados llegaron a Los Ángeles, incluso de otros países como México, para ayudar en la batalla contra este que definieron como un “infierno de llamas”. Videos muestran la aparición de un tornado de fuego.

El presidente Joe Biden declaró los incendios como un desastre mayor, permitiendo así la intervención de los militares.

Karine Jean-Pierre, su vocera, dijo el lunes:

“Nuestra administración sigue centrada en ayudar a los afectados y seguiremos utilizando todas las herramientas disponibles para apoyar los esfuerzos de extinción de incendios”.

El fuerte viento es el peor enemigo con condiciones climáticas adversas que deberían continuar esta semana, según las autoridades locales, como Anthony Marrone, jefe del Departamento de Bomberos del Condado de LA:

“Los vientos previstos combinados con la baja humedad y la baja concentración de combustible mantendrán crítica la amenaza de incendio en todo el condado de Los Ángeles”.

Las autoridades no han aún determinado la causa de estos incendios. Las agencias federales conducen las investigaciones, mientras los residentes empiezan a culpar a las compañías eléctricas locales por mal funcionamiento en sus redes.

Algo que las empresas han descartado.