Los extraterrestres han sido por mucho tiempo uno de los temas favoritos de las películas de Hollywood y de las novelas fantásticas. Sin embargo, la idea de vida inteligente en el espacio no existe únicamente en la ficción.
Durante los últimos 50 años, científicos y astrónomos han utilizado sus telescopios en busca de señales de vida inteligente. Frank Drake es un pionero de esta búsqueda.
El hechizo
Un famoso programa de radio de Orson Wells, en 1938, asustó a millones de estadounidenses haciéndoles creer que los marcianos nos estaban invadiendo. Sin embargo, más que asustado, el joven Frank Drake, se sintió cautivado ante esta posibilidad.
“Mi papá me dijo que había otros planetas, como la Tierra, en el espacio y esto me emocionó”, relata Drake, quien confiesa que esta fascinación le provocó muchas preguntas.
Drake continuó con su pasión de la infancia estudiando astronomía en las universidades Cornell y Harvard.
En 1960, el astrónomo dirigió el primer experimento de búsqueda de vida inteligente en el espacio, hoy conocido como SETI. El proyecto indagaba en el espacio por señales de una civilización extraterrestre, observando a dos estrellas cercanas con un telescopio de radio de 25 metros ubicado en West Virginia.
“Tal como los telescopios que se utilizan para ver el cielo, a las estrellas y los planetas, con la particularidad de que este lo que recibe es ondas de radio, no ondas de luz”, dice Drake.
SETI
En aquel entonces, Drake era un empleado nuevo del Observatorio Nacional de Radio y Astronomía y trato de ser muy reservado con su proyecto. El tema era tan nuevo que estaba preocupado de que sus colegas y académicos se mostraran escépticos. Sin embargo, el rumor empezó a salir a la luz y la gente respondió ofreciendo apoyo y donaciones.
Desde 1960, han existido más de 100 proyectos SETI con telescopios de radio estacionados alrededor del mundo, incluyendo Puerto Rico, Argentina, Australia, Corea del Sur e Italia. El equipo ahora es más sofisticado y grande, pero todavía no ha arrojado resultados. Drake dice que el universo es tan grade que es difícil saber hacia dónde mirar.
La búsqueda continúa
Ahora, el instituto sin fines de lucro, SETI, intenta promover los esfuerzos en Estados Unidos para construir telescopios más amplios y sofisticados. Su último proyecto, en colaboración con la Universidad de Berkeley, es el Telescopio Allen Array, que tiene 42 antenas de radio y es la estructura más avanzada para buscar vida extraterrestre construida hasta el momento.
Aunque no se han detectado señales de vida inteligente fuera de nuestro planeta, Drake sigue optimista.
“Es sólo cuestión de tiempo, y la cantidad de tiempo es un asunto de dinero. Sabemos cómo investigar, sabemos cuánto tiempo tenemos que dedicarle a la investigación, simplemente es demasiado costoso”, dice el especialista quien ahora retirado de la enseñanza colabora recogiendo fondos.
¿Cree que los resultados sucederán mientras usted esté vivo?
“Tengo 80 años, y desafortunadamente nuestros mejores pronósticos nos dicen que, incluso con nuestro grado de sofisticación y equipos, los descubrimientos tomarán algunas décadas. Por otra parte, podríamos correr con mucha suerte y recibir una señal mañana”, concluyó el astrónomo.