La Casa Blanca recibió el jueves a Sirley Ávila León, de origen cubano, y a Daniel Di Martino, ciudadano venezolano, como invitados especiales para conmemorar el Día Nacional de las Víctimas del Comunismo.
En un comunicado publicado por la oficina de comunicaciones de la Casa Blanca, se indica que este día se recuerda a los más de 100 millones de personas que han muerto "como resultado de la opresión comunista".
"Hoy, renovamos nuestro compromiso de ayudar a garantizar a todas las personas un futuro de paz y prosperidad basado en los principios básicos de la democracia: libertad, justicia y un profundo respeto por el valor de cada vida humana", reza el comunicado.
El Día Nacional de las Víctimas del Comunismo de este año coincide con el 30 aniversario de la caída del Muro de Berlín.
"A medida que conmemoramos este hito para los derechos humanos, decidimos continuar trabajando con nuestros aliados y socios para asegurar que las llamas de la libertad sigan ardiendo como un faro de esperanza y oportunidad en todo el mundo", agregó la Casa Blanca.
La prensa no fue invitada al evento el jueves. El corresponsal de la Voz de América, Bricio Segovia, conversó con Daniel Di Martino, un venezolano exiliado en Estados Unidos, quien participó en un acto en la Casa Blanca al que asistió el presidente Donald Trump como parte de la conmemoración.
Di Martino celebró el encuentro y agradeció a Trump y a su gobierno por atender y tomar medidas respecto a la situación de crisis que atraviesa Venezuela. Explicó que Trump conversó con cada uno de ellos durante varios minutos y le hizo preguntas.
Narró su visión de la situación que vive su país, de donde salió a mediados del 2016: "Me estaba graduando del colegio, no podía expresarme, si iba a protestas tenía miedo que me pasara como a mis amigos, que los secuestraban, la misma policía los torturaban (...) Quería tener una oportunidad de vida donde la mayor aspiración mía no fuera ganar dinero para alimentarme".
Estados Unidos mantiene varias sanciones contra Cuba y Venezuela, a quienes consideran opresores de los derechos humanos y países que van en contra de sus principios.
Rusia, y China, por su parte, mantiene una relación estrecha con ambas naciones latinoamericanas, así como inversiones que han servido, en particular a la Isla, a poder mantener su gobierno.
También, el jueves, la Asamblea General de la ONU votó a favor de la resolución que cada año presenta Cuba contra el embargo económico que aplica Estados Unidos desde hace décadas para presionar por un cambio en la isla de gobierno comunista.
Se trata de la 28 ocasión consecutiva que se realiza la votación, que suele ser ganada por La Habana.
