La Casa Blanca dijo el viernes que no alienta la inmigración irregular, pero tampoco aprueba las soluciones que recientemente han ofrecido algunos gobernadores republicanos, y defendió la postura del presidente Joe Biden referente al trato a los inmigrantes.
El presidente Biden ha dicho que no es razonable enviar a los migrantes de Venezuela, Cuba o Nicaragua de vuelta a sus países.
“Lo que ha dicho el presidente es que esta gente, estas madres, estos niños, estas familias están saliendo de sus países debido al comunismo, la persecución política, y él ha dicho que no deben ser utilizados como peones políticos por el gobernador [Ron] DeSantis y otros gobernadores", respondió la portavoz presidencial, Karine Jean Pierre, a una pregunta de la Voz de América en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
La vocera explicó que el mandatario en sus recientes declaraciones estaba denunciando “el comportamiento inhumano" contra los migrantes.
"El presidente ha hablado de esto, es importante tratar a la gente con dignidad", agregó.
El 15 de septiembre pasado, al menos dos autobuses con inmigrantes enviados desde Texas a Washington fueron dejados frente a la casa de la vicepresidenta Kamala Harris.
El día anterior dos aviones fletados por el gobernador DeSantis trasladaron a inmigrantes a Martha's Vineyard, Massachusetts, intensificando una táctica de los gobernadores republicanos para llamar la atención sobre lo que consideran políticas fronterizas fallidas de la administración Biden.
Según datos de la Patrulla Fronteriza de EEUU, las autoridades detuvieron entre enero y julio a migrantes 1,43 millones de veces en la frontera sur, contabilizando los que son expulsados y regresan nuevamente, lo que significa un 28% más que en el mismo período del año anterior.
* Con la colaboración de Jorge Agobian, corresponsal de VOA en la Casa Blanca.
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