Las FARC iniciaron su Décima Conferencia Nacional Guerrillera, un encuentro histórico de siete días en el que ratificarán el acuerdo de paz que alcanzaron con el Gobierno colombiano.
Allí aprobarán la dejación de las armas y sentarán las bases para convertirse en un movimiento político.
La Conferencia, organismo donde toman las decisiones centrales de su funcionamiento, cuenta con la presencia de unos 200 delegados de las FARC que representan a sus diferentes unidades.
Además estará presente su líder, Rodrigo Londoño Echeverri, alias "Timochenko", quien calificó la cita de "histórica", y los miembros del Secretariado, como se conoce al mando colegiado de la guerrilla.
Todos ellos se han desplazado hasta la remota región de El Diamante, en los Llanos del Yarí, un corredor natural de sabanas que abarca parte de los departamentos del Caquetá y Meta, en límites con la Amazonía, en donde han tenido uno de sus bastiones.
"Nos hallamos reunidos aquí, tras 52 años continuos de confrontación política y militar con el Estado colombiano (...) con una representación lo más amplia posible de todos los guerrilleros de las FARC", dijo en el discurso con el que inició los debates de una semana que serán a puerta cerrada.