Debajo del puente de la Caro, en el municipio colombiano de Chía, se encuentraban el miércoles 17 venezolanos. Entre ellos, hombres, mujeres, embarazadas y niños que han quedado sin una fuente de ingresos luego de la orden de cuarentena. Afirman que no quieren irse de este lugar ni regresar a Venezuela.
Mientras tanto, más de 700 venezolanos permanecieron en buses al norte de Bogotá, en espera de que las autoridades les permitan seguir el paso hacia la frontera en Cúcuta, de regreso a su país.
Mientras tanto, más de 700 venezolanos permanecieron en buses al norte de Bogotá, en espera de que las autoridades les permitan seguir el paso hacia la frontera en Cúcuta, de regreso a su país.