Corea del Norte y Corea del Sur desmantelaron el martes enormes altoparlantes usados para transmitir propaganda al estilo de la Guerra Fría a través de su tensa frontera.
Mientras tanto, el presidente surcoreano, Moon Jae-In, pidió a las Naciones Unidas que observe el planeado cierre del sitio de pruebas nucleares de Corea del Norte.
El desmantelamiento de docenas de altoparlantes está en línea con un acuerdo de reconciliación por parte de los líderes de las dos Coreas alcanzado en la histórica cumbre el viernes pasado. Aún no está claro si tales medidas generarán una paz permanente porque no se produjo ningún avance sobre la crisis nuclear norcoreana durante la cumbre.
Soldados surcoreanos desmantelaron los altoparlantes en varias áreas fronterizas ante la presencia de periodistas, antes de sacarlos del área, dijo el Ministerio de Defensa.
Un funcionario militar surcoreano dijo posteriormente el martes que Corea del Norte también ha comenzado a desmantelar sus altoparlantes de propaganda anteriormente este día.
Ambas Coreas habían apagado sus transmisiones de propaganda a lo largo de 248 kilómetros (154 millas) de frontera la semana pasada antes de la cumbre.
Habían reiniciado su guerra de propaganda a comienzos de 2016 cuando las tensiones aumentaron vertiginosamente, después de la cuarta prueba nuclear de Corea del Norte.
Corea del Sur transmitía canciones pop al igual que críticas a las condiciones de derechos humanos en el Norte, noticias mundiales y pronósticos del tiempo. El Norte transmitía mensajes contrarios al Sur y elogios a sus propio sistema político.
