Cuba legalizó la compra y venta de automóviles para sus ciudadanos por primera vez desde la revolución de 1959.
El gobierno hizo el anuncio en abril de 2011, pero las ventas estaban en suspenso hasta que la medida fuera aprobada mediante una ley.
La nueva política era esperada como parte de una serie de reformas que están siendo implementadas por el presidente Raúl Castro para disminuir los controles estatales sobre la economía.
La regulación permite la transferencia de la propiedad de vehículos para compra, venta o donación entre cubanos que viven en la isla o extranjeros que residan en Cuba.
Los residentes extranjeros que viven temporalmente en la isla, estarán limitados a la compra o importación de dos vehículos durante su estadía.
Pero informes indican que además de los residentes extranjeros, sólo los cubanos con permisos del gobierno tendrán autorización para importar vehículos, mientras que el resto de los cubanos estarán limitados a automóviles que ya estén en la isla.
Los cubanos que salgan del país permanentemente, podrán vender sus automóviles o donarlos a sus familiares.
Previamente, solo automóviles que estaban en Cuba antes de 1959 podían ser comprados o vendidos libremente, lo que explica porque hay tantos automóviles antiguos circulando por las calles, muchos de ellos fabricados en Estados Unidos. También se pueden ver muchos automóviles de la era soviética.
No está claro cuántos cubanos podrán comprar o vender autos, dado que una persona promedio gana aproximadamente $20 dólares por mes.
