El Departamento de Estado dio a conocer un comunicado en el que alerta a los ciudadanos estadounidenses a posponer o cancelar viajes innecesarios a la parte continental de Honduras debido a las protestas políticas en curso y al potencial de violencia.
La nota menciona que hay un aumento en las manifestaciones e interrupciones como resultado de una disputa electoral.
Indica que las islas de la Bahía de Honduras (Roatán, Utila y Guanaja) no se han visto significativamente afectadas en este momento.
Señala que aunque las manifestaciones actuales se han mantenido en gran parte pacíficas, podrían ser volátiles y peligrosas, y han incluido lanzamiento de rocas, asaltos y quema de neumáticos.
Agrega también que se han producido disturbios y saqueos en muchas ciudades de Honduras y que los cierres de carreteras causan demoras extremas en el tráfico, lo que posiblemente limita el acceso a los aeropuertos en todo el territorio continental de Honduras.
La alerta de viaje a Honduras vence el 31 de diciembre de 2017.