El gobierno estadounidense declaró una emergencia de salud pública en Puerto Rico a causa de la rápida y extensa propagación del virus del Zika.
La declaratoria indica que el virus representa ”una amenaza significativa” a la salud de la mujeres embarazadas que podrían estar infectadas y sus hijos.
La decisión da al gobierno puertorriqueño acceso a fondos adicionales para combatir el Zika hasta que el Congreso autorice el presupuesto de emergencia de $1.9 millones de dólares solicitado por la administración Obama en febrero.
“Estamos comprometidos a enfrentar el brote de Zika en Puerto Rico con la urgencia necesaria”, dijo la secretaria de Salud y Servicios Humanos Sylvia Burwell en un comunicado.
El gobierno federal tomó acción a pedido del gobernador de la isla, Alejandro García Padilla.
La medida permite a Puerto Rico, territorio asociado de Estados Unidos, solicitar fondos para contratar y entrenar trabajadores desempleados para los esfuerzos de control de mosquitos y para iniciativas de educación y contacto con los ciudadanos.
Puerto Rico tambi[en puede ahora reasignar temporalmente a trabajadores de salud para asistir en la respuesta al Zika.
Hasta el 12 de agosto, el Departamento de Salud de la isla había reportado 1.690 casos de Zika confirmados en laboratorio, incluidas infecciones en 1.035 mujeres embarazadas.