La influencia de Venezuela en América Latina esta en “franco declive” y sólo la tercera parte de la región tiene una visión positiva del gobierno del presidente Hugo Chavez, según el secretario de Estado adjunto de EE.UU. para el Hemisferio Occidental, Arturo Valenzuela.
En una audiencia en el Comité de Relaciones Exteriores del Senado, Valenzuela señaló que aun así la situación en esa nación latinoamericana es una de “las preocupaciones permanentes” de Washington.
Valenzuela reiteró ante el Senado lo dicho el martes en otra audiencia en la Cámara de Representantes de que América Latina guarda suma importancia para EE.UU y por eso la secretaria de Estado, Hillary Clinton, ha viajado más que ninguno de sus antecesores a la región, dijo.
También realzó la gira que a fines del mes próximo realizará el presidente Barack Obama por tres países del área, Brasil, Chile y El Salvador.
Sin embargo, el senador demócrata Bob Menéndez puso en entredicho la labor de promoción de la democracia por parte de EE.UU en la región viendo lo que sucede en países como Venezuela y Nicaragua, y destacó que aun la población en casi el 40 por ciento del hemisferio vive con menos de dos dólares al día.
Menéndez también se mostró alarmado por la violencia desatada en México por el narcotráfico y dijo que en ese país la situación es particularmente “horripilante”.
El senador afirmó estar preocupado de que los intereses y desafíos de EE.UU no sean congruentes con lo que se persigue, y señaló la disminución de 7 por ciento en los fondos destinados a la lucha antinarcóticos en la región, incluyendo la Iniciativa Mérida (con México) y el Plan Colombia.
El secretario de Defensa adjunto para el Hemisferio Occidental, Frank Mora, calificó de “extraodinaria” la cooperación en materia de seguridad entre los gobiernos de EE.UU.y México y dijo que Washington está recurriendo a la “diplomacia de defensa” para institucionalizar esos lazos también con otros países de la región.
Mora destacó además la cooperación en materia de defensa con Colombia y Brasil, y respecto a este último país dijo que los lazos militares nunca han sido tan sólidos desde 1977.
Sobre Cuba, el senador republicano Marco Rubio, cuestionó la política de la Casa Blanca de promover más viajes desde EE.UU. a la isla y dijo que sólo por este concepto el gobierno cubano, que ”sigue siendo un régimen represivo”, recibe ingresos de cuatro mil millones de dólares al año.
Rubio emplazó al Departamento de Estado a que alerte a quienes viajen a la isla que pueden correr la misma suerte que el estadounidense Alan Gross, que encara una pena de cárcel de 20 años, acusado de espionaje por haber llevado equipos de comunicación a la comunidad judía cubana.
El senador también reprochó a la casa Blanca que se haya dilatado tanto la ratificación de los tratados de libre comercio con Panamá y con Colombia, país que según dijo "es nuestroa aliado más fuerte en la región”.
Demandan liberación de Gross
En tal sentido, durante la audiencia, Valenzuela declaró que Estados Unidos deplora el reciente anuncio de Cuba de que los fiscales de ese país quieren una sentencia de 20 años para Gross. Valenzuela calificó a Gross como un trabajador dedicado que se encontraba en Cuba suministrando apoyo a la comunidad judía en la isla y solicitó la “liberación incondicional” del contratista.
Los medios cubanos informaron que Gross está acusado de violar la independencia e integridad territorial de Cuba y que pronto se daría a conocer una fecha para el juicio. Estados Unidos ha sido informado de la decisión a través de canales diplomáticos y a la familia de Gross se le permitirá asistir al juicio.
La Casa Blanca ha dicho que la medida “multiplica la injusticia” que Gross ya ha sufrido. Según una reciente declaración, Estados Unidos sigue sumamente preocupado por el bienestar de Gross y de su familia y pide su liberación inmediata.
El Departamento de Estado acusó a Cuba de violar la justica al mantener a Gross detenido por mucho tiempo antes de presentarle acusaciones. Gross está detenido en Cuba desde diciembre de 2009.